Esperanza entre los afectados por las termitas de Villanueva de Tapia

Los vecinos de Villanueva de Tapia viven pendientes de la plaga de termitas que afecta a medio centenar de viviendas de su municipio, eso sí, con el deseo de que los tratamientos que han comenzado a instalarse tengan el efecto deseado y pueda controlarse la plaga que les tiene muy preocupados. Uno de los vecinos afectados es Luis Baz, que descubrió hace aproximadamente un año que una parte del mostrador de su antigua tienda tenía evidentes signos de que las terminas se habían instalado en el mismo y que habían comenzado a comerse parte de su madera, aunque no sabe con seguridad si la presencia de estos insectos se remonta a 2 o 3 años hasta que se percató de su presencia y de que su vivienda se encontraba afectada.

Luis reconoció que existe "preocupación" entre los vecinos del municipio ante las dimensiones que tomó la plaga, ya que muchas viviendas tienen bastantes años y cuentan con madera en sus construcciones, por lo que existe el peligro de que las termitas puedan seguir extendiéndose si las medidas aplicadas por la empresa especializada que contrató el Consistorio no tienen los efectos anunciados, aunque este vecino se mostraba esperanzado de que sí tengan un efecto positivo y las termitas terminen por desaparecer.

En su caso ya han sido colocados los primeros cebos y ahora tendrán que proceder a realizar una revisión en el mes de abril, según explicó este vecino. En este sentido, desde la empresa especializada explicaron que son tres las fases que tiene el tratamiento que se está aplicando, que pasa por colocar cebos de celulosa en un primer momento en las zonas en las que se sospecha que hay actividad, tras lo que se procede a cambiarlos una vez que las termitas comienzan a alimentarse de dicha celulosa, colocando otro similar pero ya el biocida incorporado, de modo que las termitas obreras alimentan a la reina y a las ninfas propagando así el veneno en la colonia y llevándola a su colapso.

De este modo se asegura que la actividad de las colonias de termitas se reduce en un 95% durante el primer año, aunque la actividad de control se mantendrá durante los próximos cinco años, lo que permite actuar de inmediato si se descubren nuevos termiteros. Mientras tanto, ante la gravedad de la plaga, Villanueva de Tapia se convertía ayer en foco de buena parte de los medios de comunicación, atraídos por la particular plaga que tenía en jaque a los responsables municipales y que esperan poder frenar y evitar su extensión a viviendas colindantes que todavía no han sido invadidas por las termitas. Al mismo tiempo, se busca garantizar la seguridad de las viviendas que ya han sido dañadas.