Alhaurín el Grande volvió a revivir durante la madrugada de este miércoles una situación que ya se antoja habitual. Las fuertes lluvias registradas en el municipio, que ha sido el más afectado de la provincia de Málaga, provocaron una riada en la que varios vehículos fueron arrastrados. A lo largo de la noche cayeron hasta 100 litros por metro cuadrado. La tensión se centró, según el testimonio aportado a este periódico por la alcaldesa, Antonia Ledesma, entre las 4 y las 5 de la mañana. Fue en ese periodo cuando una tormenta descargó con intensidad. 

"La noche ha sido horrible. En tres cuartos de horas cayeron 80 litros. Aquello era un diluvio", describió. Las lluvias dieron después un respiro pero ya habían afectado en zonas del municipio en las que, habitualmente, cae "muchísima agua" y donde "algunos vehículos fueron arrastrados" como consecuencia de la riada. También varios puntos de caminos rurales con difícil acceso tuvieron que ser cortados. 

Más allá del arrastre de tierra y de los saneamientos afectados, efectivos del Consorcio de Bomberos de Málaga tuvieron que actuar tras inundarse las dependencias de la Policía Local. A este respecto, el diputado provincial de Seguridad y responsable del CPB, Manuel Marmolejo, recordó que las comarcas de Costa del Sol Occidental y Valle del Guadalhorce permanecerían en aviso naranja hasta el mediodía de este miércoles y que el resto de la provincia seguirían en aviso amarillo.

No hubo, al menos, daños personales ni tampoco se tiene constancia de que ningún vecino tuviera que ser evacuado. Pero el Ayuntamiento, afirmó su máxima representante, deberá realizar una valoración más exhaustiva dado que, por el momento, solo se conocen los daños superficiales, entre otros los de una obra que supone una inversión "de más de 500.000 euros".

Ledesma subrayó que las infraestructuras "han funcionado", pese a que haya caído "muchísima agua en muy poco tiempo". "Era difícil que no ocurriera esto", recalcó. Según recordó, se trataba de la tercera vez que en Alhaurín el Grande llovía con tanta fuerza. 

"Era difícil que no ocurriera esto. Ha caído muchísima agua en poco tiempo"

En septiembre, las fuertes precipitaciones se saldaron con incontables incidencias en el municipio: calles cortadas, una docena de vehículos desplazados por una riada en el casco urbano, muros caídos, casas anegadas y la rotura de una tubería en la pedanía de Villafranco del Guadalhorce. La Junta de Andalucía había activado el Plan de Emergencias ante el Riesgo de Inundaciones en su fase provincial en Málaga ante las lluvias registradas. La situación era, en palabras de la alcaldesa, un auténtico "caos".

Alhaurín el Grande intentaba recomponerse tras haber sido uno de los municipios más afectados de la provincia por las intensas lluvias de la madrugada de aquel 14 de septiembre. Los operarios trabajaban en la recolocación de adoquines y losas de las aceras, levantadas por la fuerza de las precipitaciones, mientras que los vecinos intentaban recuperar la normalidad después de vivir un episodio que, aseguraban entonces los vecinos, no haberse vivido antes.