El retablo de la Virgen del Carmen de Marbella tiene sello rondeño

El nuevo retablo de la Virgen del Carmen de Marbella, nombrada tercera patrona de la ciudad, tiene sello rondeño. Ha sido el tallista Juan Carlos Sedeño quien ha dirigido el proyecto para dar forma a esta obra que le fue encargada por la hermandad de la patrona de los marineros. Ahora, dos años y medio después, su trabajo ya luce en el templo de Nuestra Señora de la Encarnación, donde fue bendecido el pasado lunes por el Obispo de Málaga, Jesús Esteban Catalá.

Pero el sello rondeño no se encuentra exclusivamente en la talla, ya que también está presente en los angelotes, creados por el imaginero rondeño Alberto Pérez, y el marmolizado, que ha estado a cargo del también rondeño Antonio Vega. Mientras tanto, el artesano que se ha encargado del dorado de los trabajos ha sido el cordobés Ángel Varo, único integrante del equipo que no es natural de Ronda.

El grueso del trabajo ha sido realizado en el taller situado en el Barrio de San Francisco de la ciudad del Tajo. Allí se ha trabajado la madera de cedro brasileño, se ha dado el color azul en homenaje al mar y dorado con oro de 24 kilates. Para el artista, este trabajo es el más importante de todos, aunque ha realizado casi con una treintena de tronos y ahora se enfrenta al de la hermandad malagueña del Dulce Nombre.

Sedeño se muestra fiel a su estilo y defiende el uso de la talla rondeña y malagueña, aunque en ocasiones le suponga peder trabajos, en especial en Sevilla. Eso sí, asegura que este estilo tiene un gran valor en otras regiones.