"Quien piense que se puede mantener el casco antiguo más importante de España sólo con el IBI que pagan los sevillanos es un iluso. Tenemos que buscar fórmulas alternativas e imaginativas". Con estas palabras ha justificado el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, la implantación de la tasa turística. El popular se ha mostrado este miércoles "totalmente partidario" de poner en marcha esta tasa que debe aprobar la Junta de Andalucía, administración que hasta la fecha se ha mostrado bastante reticente con este asunto. Las declaraciones de Sanz han avivado el debate con el PSOE, cuyo portavoz municipal y anterior alcalde, Antonio Muñoz, siempre se ha mostrado partidario de la tasa y le ha reprochado que apueste ahora por algo que rechazó hace unos meses.

José Luis Sanz ha realizado estas declaraciones sobre la tasa turística precisamente en el Real Alcázar, uno de los monumentos más visitados de la ciudad que en los primeros cuatro meses del año ha recibido en los primeros cuatro meses del año a nada más y nada menos que 800.000 visitantes, todo un récord. El alcalde se ha referido a las colas de visitantes, registradas un día más, para acceder al Alcázar o la elevada afluencia de público en las plazas del Triunfo y de la Virgen de los Reyes desde primeras horas de la jornada. "El visitante que viene a esta ciudad, única en el mundo, tiene que contribuir al mantenimiento de este casco histórico, que si no buscamos fórmulas alternativas es imposible", ha subrayado.

Sanz ha advertido que la ciudad no se puede mantener en perfecto estado sólo con los impuestos que pagan los sevillanos, por lo que justifica la implantación de esta tasa a los foráneos: "Quien piense que se puede mantener el casco antiguo más importante de España con el IBI que pagan los sevillanos es un iluso, con lo que tenemos que buscar fórmulas alternativas e imaginativas".

El alcalde ha señalado que el destino del dinero recaudado por la tasa he de ser finalista: "Tiene que ir destinada a la rehabilitación del patrimonio histórico, a la promoción de la imagen de la ciudad, a potenciar el sector turístico, que es muy importante, e incluso debe existir un pequeño porcentaje que llegue a todos los rincones de los barrios. Creo que es una magnífica oportunidad para que un vecino de San Jerónimo, de Pino Montano o de Eduardo Dato vea que el turismo de la ciudad, que le molesta entre comillas para muchas cosas, también beneficia a su barrio, a su parque, a su calle", ha concluido.

El PSOE le pide que se aclare

Por su parte, el portavoz del Grupo Socialista del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, ha reclamado al alcalde que "se aclare" sobre la tasa turística, reprochándole que este miércoles haya apoyado la medida, ligándola a un consenso con el sector y al carácter finalista de lo recaudado, pero en el Pleno ordinario de diciembre votase junto a Vox en contra de una moción del PSOE en favor de la iniciativa.

"Todo lo que rechazó hace cuatro meses por ser una iniciativa del PSOE, ahora dice que lo defiende, lo cual es el colmo del cinismo. Buscábamos en el pleno de diciembre unidad de la Corporación hispalense sobre la necesidad de implantar la tasa turística y primó el interés partidista de Sanz sobre el beneficio general para la ciudad que traería la tasa turística, y que ahora él mismo reconoce", ha señalado Muñoz en un comunicado.

Según expuesto Muñoz, "Sevilla fue la primera ciudad en abrir este debate sobre la fiscalidad al turismo hace seis años. Con la tasa turística siempre se ha hablado de usos finalistas, que es lo que, después de tanto tiempo, parece que Sanz ha descubierto ahora: que cabe destinar el dinero recaudado a inversiones".

En este sentido, el ex acalde se ha congratulado de que lo que ha considerado una nueva rectificación de Sanz "Bienvenida sea por el interés general de Sevilla. Pero ahora que se abre al debate, le exigimos seriedad y coherencia y que no siga mareando al constatar su fallido intento de cobrar por visitar la Plaza de España".

Muñoz ha recordado que el grupo municipal socialista lleva años defendiendo para Sevilla la implantación de una tasa turística merced a un marco que regulen las administraciones superiores y competentes para ello, a aplicar sobre las pernoctaciones en todo tipo de establecimientos de alojamiento (hoteles, pensiones, apartamientos, viviendas turísticas, etcétera) cuya recaudación revertiera en la mejora de la competitividad de la industria turística, en la promoción nacional e internacional de Sevilla, en iniciativas para la sostenibilidad del turismo, en los servicios municipales, en rehabilitación patrimonial e incluso en otras mejoras en barrios de la ciudad. "Y todo desde el consenso con el sector turístico, al ser el que canalizaría la recaudación de la tasa", ha matizado, pesando el rechazo de los hoteleros a esta medida.

"El anterior gobierno local ya alcanzó un principio de acuerdo con el sector en 2022, pues las condiciones que exigían eran perfectamente razonables: básicamente, que fuera un modelo consensuado que no supusiera gastos añadidos para su gestión, que la recaudación fuera finalista y que el control de la inversión se fiscalizara por parte un organismo mixto en el que participara el sector privado", según ha explicado Antonio Muñoz, quien ha recordado que, tras una aportación hecha a la moción socialista por parte de Con Podemos-Izquierda Unida, se contemplaba también que hubiera recursos para mejorar los barrios desfavorecidos.