El juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla investiga la muerte del joven cordobés Álvaro Prieto, cuyo cadáver ha sido encontrado este lunes entre dos vagones de un tren en la estación de Santa Justa de Sevilla.

Según las primeras conclusiones de la investigación la muerte de Álvaro Prieto fue accidental. A falta de los resultados de la autopsia, los primeros indicios apuntan a que el joven cordobés de 18 años murió electrocutado en el acople de dos vagones de un tren. 

El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado que el juzgado de Instrucción 11 de la capital hispalense, que dirige la magistrada Cristina Loma, se hallaba de guardia de incidencias la semana cuando se recibió la denuncia de la desaparición del joven, el pasado jueves, 12 de octubre. Inicialmente, y conforme establecen los protocolos en estos casos, el juzgado decretó el secreto de las actuaciones, secreto que se ha alzado una vez se ha localizado el cuerpo.

Una comisión judicial bajo la coordinación del Juzgado de Instrucción número 17 de Sevilla, que se encuentra este lunes de guardia de incidencias, se ha trasladado a la zona donde ha sido hallado el cuerpo para proceder al levantamiento del cadáver.

Una vez que se proceda al levantamiento del cadáver por parte de la comisión judicial y del médico forense, el cuerpo será trasladado al Instituto de Medicina Legal (IML) de Sevilla, donde se le practicará la correspondiente autopsia.

El estudio de los forenses será determinante para esclarecer si el joven sufrió un percance cuando se subió al tren, se pudo quedar dormido, o sí tenía traumatismos previos, según han precisado a este periódico fuentes de la investigación.