De las derrotas como la de ayer también se debe aprender. Ésa es la principal conclusión que se puede extraer de la alocución de Aíto García Reneses al término del partido. Fiel a su comedido mensaje desde que tomó las riendas del club, el técnico madrileño apeló a la lección que deben aprender sus jugadores tras lo sucedido ayer sobre el parqué del Carpena: "Este partido nos hace bajar un poco de la nube en la que estábamos y pensar que para intentar hacer lo máximo no nos vale con lo que hemos hecho hasta ahora".

A este respecto, el ex seleccionador nacional reconoció que su equipo se había dejado influir involuntariamente por el clima de optimismo desatado en la ciudad: "A veces lo que flota en el ambiente te traspasa. Antes del partido comentaba que si bien el Real Madrid fue capaz de cambiar el rumbo, el Cajasol no fue capaz. Una cosa es ser consciente de ello, y otra no darse cuenta de la realidad porque habíamos ganado todos los partidos hasta el día de hoy [por ayer]. En ese sentido está bien el haber perdido porque nos sitúa más en la realidad".

Para Aíto, los problemas en el rebote marcaron el devenir del partido: "Creo que lo principales problemas del primer tiempo los hemos tenido en el rebote defensivo. Ellos han tenido muchas segundas y terceras oportunidades", dijo el técnico del Unicaja, que también remarcó las actuales deficiencias de la plantilla por culpa de las lesiones: "El equipo ha trabajado bien en la medida de sus circunstancias actuales. Hemos tenido problemas con la defensa del Tau, que es la más fuerte de las que nos hemos medido hasta ahora. No debemos quedarnos en una nube y tenemos que darnos cuenta de que tenemos que trabajar para mejorar. Saber atacar contra esa defensa más dura, por ejemplo".

El hecho de que esta jornada no haya partido entre semana será, a juicio del madrileño, una circunstancia muy positiva para su equipo: "Hay otras cosas que mejorar, pero lo más importante es que tenemos que pensar que tenemos que prepararnos para enfrentarnos a equipos como el Tau".

Más allá de los problemas en el rebote, Aíto destacó el acierto del Tau en los momentos decisivos del partido: "Hemos llegado a un final apretado en el que ellos han estado muy acertados al final. Hemos tenido opciones hasta el final porque aunque no hemos hecho bien algunas cosas, sí hemos mantenido el espíritu".

Sobre la lesión de Germán Gabriel, que será baja algunos meses por el esguince de tobillo de grado tres con rotura de ligamentos que se produjo ayer, el madrileño no podía ocultar su decepción: "Ni siquiera ha podido venir al vestuario porque tenía mucho dolor. El perderlo en una plantilla que ya está corta por las lesiones es un problema, también por el tema de los cupos".

Finalmente, el madrileño se refirió al hecho de que el Tau se haya convertido en estos últimos años en la bestia negra del Unicaja: "No se si alguien lo ha tenido en cuenta. Yo no. Hay equipos y jugadores que juegan bien en un campo determinado, pero lo más importante es lo que tú haces, no las inercias del rival".