El pasado miércoles el Elche le endosó cuatro goles al Deportivo. Para prácticamente dejar el barco de nuevo atracado en Primera. No es, desde luego, la radiografía de la trayectoria ilicitana esta temporada. De hecho, hasta sorprende el rendimiento evidenciado por el conjunto de Fran Escribá, que al final de la primera vuelta era serio candidato a abandonar la categoría. Por suerte para la competición, no todo es matemática, las segundas vueltas suelen dejar muchos cambios en la zona de abajo. Y así se ha ido orquestando la remontada del Elche. Con un triunfo más habrá firmado matemáticamente su continuidad, pero la realidad es que seguramente no le haga falta sumar un solo punto más para quedarse.

Escribá es el artífice de este segundo milagro consecutivo de los franjiverdes. Sólo él consiguió sujetar al equipo cuando se caía. Por su carácter y por su método deportivo, ideado para equipos que quieren sobrevivir en la élite. Sin embargo, siempre hace falta gol. Y Jonathas, una de las revelaciones de la primera vuelta, ha terminado de completar el trabajo.

sin balón

A Fran Escribá le gusta que sus equipos estén muy juntos en el campo. No es muy amante de adelantar las líneas en la presión, pero se hace correoso.

con balón

A veces juega con dos puntas y busca el balón directo, pero a la contra también se siente a gusto.

lo mejor

Sacar petróleo de un plantel limitado y sobrevivir pese a sus pocas opciones de fichar.

lo peor

La amenaza de un descenso administrativo por la mala gestión.