La familia Ouattara vivió ayer su día más feliz en España ya que al encuentro del pequeño Adou con su madre se sumó la puesta en libertad del cabeza de familia, Ali Ouattara, que fue excarcelado tras un mes en prisión.

El caso del niño de la maleta escribió una de sus páginas más felices coincidiendo con el hecho de que la madre, Lucie Ouattara, pudo volver a abrazar a su pequeño Adou, de 8 años, después de varias semanas sin poder verlo.

Lucie Ouattara llegaba a Ceuta a primeras horas de la mañana para llevarse al pequeño Adou y depositar la fianza de 5.000 euros para que su marido pudiera abandonar la prisión de Botafuegos en Algeciras. La familia Ouattara vivía, de esta manera, uno de sus días más felices en España desde que un cayuco en el año 2006 alcanzaba las costas de Fuerteventura, lugar donde han establecido su residencia y donde el padre trabaja en una lavandería.