Este es el mejor pueblo de Málaga que puedes visitar este mes de octubre: "Es de los más pequeños pero destaca por su belleza, su encanto y su magia"
Atajate, el municipio más pequeño de Málaga con una gran historia que contar
Arquitectura popular, tradición y tranquilidad en plena Serranía de Ronda
El Museo del Mosto, símbolo de la cultura vitivinícola del pueblo
Entre los valles del Guadiaro y del Genal, a 750 metros sobre el nivel del mar, se alza Atajate, el municipio más pequeño de la provincia de Málaga. Con apenas un centenar y medio de habitantes, este enclave de la Serranía de Ronda reúne historia, arquitectura popular, tradiciones centenarias y un entorno natural de gran valor y es nuestra gran apuesta para este mes de octubre entre los pueblos de Málaga, un mes especialmente propicio para descubrir su patrimonio y pasear por sus calles empedradas, donde cada rincón cuenta una parte de su pasado.
Atajate, que es uno de los Pueblos Mágicos de Málaga, conserva intacto el encanto de los pueblos blancos andaluces. Sus casas de piedra, cal y teja árabe se apiñan en callejuelas estrechas y sinuosas adornadas con macetas de flores. Las fachadas dieciochescas y la tranquilidad de sus plazas refuerzan la sensación de estar ante un lugar suspendido en el tiempo. La Cruz de Piedra, ubicada en la Plaza de la Constitución, es uno de los símbolos del municipio y un hito que refleja la antigüedad de su legado.
La actual Iglesia de San Roque, edificada hacia 1830 sobre el antiguo cementerio, es una de las construcciones más representativas del pueblo. En ella participó todo el vecindario, lo que le otorga un fuerte significado comunitario. Otro ejemplo del pasado cotidiano es el lavadero público construido en 1932, una muestra de la arquitectura popular realizada con materiales de la zona, cuya agua procede de la Fuente de las Perdices. En el Barrio Alto destaca también una fuente decorada con flores y levantada en 1966, que completa el circuito de puntos de interés vinculados al agua, tan presente en la historia local.
El Museo del Mosto y la tradición vitivinícola
Hablar de Atajate es hablar del mosto, el primer vino que se obtiene de la vendimia. En el Museo del Mosto, situado al aire libre a través de murales cerámicos, herramientas tradicionales y textos explicativos, se puede seguir todo el proceso de elaboración desde la viña hasta la copa. Esta actividad hunde sus raíces en los viñedos que aún sobreviven en las laderas del municipio, testigos del antiguo esplendor vitivinícola de la comarca.
Un entorno natural privilegiado
Rodeado de tajos, barrancos y formaciones calizas como el llamado Torcal de Atajate, el pueblo ofrece un paisaje idóneo para el senderismo y el contacto directo con la naturaleza. Su privilegiada ubicación a 745 metros de altitud permite disfrutar de vistas espectaculares sobre el Valle del Genal y constituye punto de partida para varias rutas homologadas por la Federación Andaluza de Montañismo, además de contar con una vía ferrata para los más experimentados. En las cercanías se localizan las Cavernas de los Tajos, un paraje de gran belleza donde se hallaron monedas y cerámicas de época romana.
Fiestas y costumbres que marcan el calendario
Pese a su reducido tamaño, Atajate mantiene un calendario festivo propio. En agosto se celebran las fiestas patronales en honor a San Roque con procesiones, verbenas, actuaciones musicales y competiciones populares. El Domingo de Resurrección tiene lugar la singular Fiesta del Huerto, también conocida como Fiesta de Moros y Cristianos, en la que vecinos ataviados con ropas árabes recrean escenas festivas frente a la iglesia. Y en noviembre llega la Fiesta del Mosto, declarada de Singularidad Turística Provincial, donde se degustan migas y se celebra la bebida más emblemática del municipio.
Gastronomía vinculada a la tierra
La cocina de Atajate refleja la unión entre tradición y productos locales. Entre sus especialidades destacan guisos con hierbas silvestres, la olla, guisos de conejo y gazpacho caliente. En el apartado dulce, las recetas de raíz morisca como pestiños, piñonates, roscos y enreaíllos completan la oferta gastronómica, en la que el mosto ocupa un lugar central como acompañamiento y seña de identidad.
Cómo llegar a Atajate
Situado a unos 120 kilómetros de Málaga capital, Atajate se alcanza por carretera a través de la A-357 hasta Ardales y después por la A-367 hacia Ronda, continuando por la A-397 y la A-369. El trayecto tiene una duración aproximada de una hora y media en coche.
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