La ruta secreta de senderismo de Málaga que te lleva hasta el único árbol de la provincia considerado 'Monumento Natural'

Málaga ofrece paisajes imposibles, ya lo sabemos, también recorridos únicos, algunos secretos como esta ruta de senderismo que nos lleva hasta el que, hasta el momento, es el único árbol de la provincia considerado 'Monumento Natural'. Nos vamos hasta la Sierra de las Nieves donde atravesamos uno de los itinerarios más más sorprendentes de toda la provincia de Málaga, una ruta con la que atravesaremos bosques únicos, donde la naturaleza parece más viva que nunca, y con la que acabaremos en el conocido como pinsapo de Las Escaleretas, el único árbol que tiene esta denominación y, cómo no, tenía que ser un pinsapo.

Para llegar a él tendremos que irnos hasta el pequeño y bonito pueblo de Parauta, es en sus términos donde encontramos un pinsapar mágico, un escenario donde la naturaleza ha labrado su propia historia y con la que podremos recorrer una ruta de unos 20 kilómetros de distancia, ida y vuelta, y una duración de unas seis horas. Durante nuestro trayecto visualizaremos formaciones forestales de todo tipo, encinares y pinsapares de una majestuosidad sin parangón, de una riqueza botánica que, a medida que ascendemos, parece evolucionar.

Del encinar al pinsapar: las primeras etapas del sendero

Esta ruta de senderimo toma como punto de partida un carril que conduce hacia la Fuente Conejeras, próxima al camping del mismo nombre. Desde el inicio, el sendero se adentra en un extenso encinar que marca el primer tramo de la ruta. La vegetación envuelve el camino hasta llegar a un cruce situado junto al cauce seco del arroyo Carboneras, donde confluyen tres posibles desvíos: el que se dirige al cortijo de Rajete, el que asciende hacia la Fuenfría y el que continúa hacia el interior del itinerario principal.

Siguiendo este último, el sendero alcanza la Finca de La Nava, conocida por sus alojamientos rurales y su actividad cinegética. Desde este punto se divisan ya las laderas del Cerro Alcojona, que albergan uno de los pinsapares más destacados del territorio malagueño. A medida que el camino progresa, el encinar se transforma en un pinar de repoblación, preludio del paisaje que dominará en las zonas de mayor altitud.

El ascenso avanza entre curvas y cambios de pendiente hasta llegar al Área Recreativa de Quejigales y Tolox, uno de los enclaves más conocidos de la sierra. A partir de aquí, el sendero continúa hacia el Llano de la Laguna, situado alrededor del kilómetro nueve. En este lugar nace un ramal señalizado como Sendero de la Escalereta, que conduce directamente hacia uno de los puntos más emblemáticos de la ruta: el monumental pinsapo que da nombre al tramo.

El pinsapo de Las Escaleretas: un Monumento Natural único en Málaga

En pleno corazón del pinsapar del Cerro Alcojona se alza el pinsapo de Las Escaleretas, un ejemplar considerado el abeto más antiguo del mundo, con una edad que se estima entre tres y cuatro siglos. Sus dimensiones lo convierten en un referente botánico de primer orden: alcanza los 26 metros de altura, proyecta una sombra cercana a los 200 metros cuadrados y posee un tronco de tal grosor que se necesitarían tres personas para rodearlo.

Este árbol monumental se encuentra junto al antiguo camino de Las Lajas, una vía histórica que comunicaba las vegas de río Verde con Ronda y el Valle del Genal. El nombre del pinsapo procede precisamente de la disposición de las lajas calizas del entorno, que recuerdan a escalones naturales. El enclave forma parte de una de las masas de pinsapo mejor conservadas de Andalucía, exclusiva de la Sierra de las Nieves, la Sierra de Grazalema y algunas montañas del norte de África.

Ascenso al Cerro Alcojona y vistas que conectan continentes

Tras la visita al pinsapo de Las Escaleretas, el sendero continúa por un bosque mixto donde conviven pinsapos, pinos, encinas y quejigos. Este tramo conduce hasta los 1.420 metros de altitud del Cerro Alcojona, que funciona como un mirador natural de extraordinaria amplitud. Desde su cima se abren panorámicas que abarcan el estrecho de Gibraltar, las montañas del Atlas marroquí, la Sierra Bermeja, los pueblos del Valle del Genal y las Sierras de Líbar y Grazalema.

La bajada desde el cerro se realiza por su ladera oeste, un descenso con vistas al cortijo de La Nava que enlaza con el cortafuegos que delimita el pinsapar. Este tramo final conduce de nuevo al carril del Llano de la Laguna, cerrando así un itinerario que combina paisaje, patrimonio natural y memoria ecológica.