Los problemas de inundabilidad del río Guadalhorce en su tramo final vuelve a ocupar, al menos en el plano teórico, al Ayuntamiento de Málaga y a la Junta de Andalucía. Sin novedades sobre la sustitución del puente de la antigua N-340, que requiere de una inversión próxima a los 60 millones de euros, ambas administraciones trabajan en la redacción de sendos estudios con los que diseñar posibles actuaciones con las que minimizar el riesgo sobre la zona.

No obstante, según informó el delegado provincial de Medio Ambiente, Adolfo Moreno, la intención de la Junta es aprovechar una próxima reunión con la ministra del ramo para reclamarle la sustitución del puente de la antigua N-340, que se considera como "el gran problema".

Ultiman la licitación para la redacción del proyecto de la EDAR Norte

La cuestión centró parte del encuentro que ayer mantuvieron en Sevilla el consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, y el alcalde de la capital de la Costa del Sol, Francisco de la Torre. El encuentro permitió abordar otros asuntos de interés para la ciudad, como el impulso de la EDAR Norte; la sequía y la necesidad de poner en funcionamiento de manera "urgente" los pozos de Aljaima; el parque metropolitano de Arraijanal, y la integración urbana del río Guadalmedina. Al término del encuentro, el regidor malagueño, que estuvo acompañado de los concejales de Ordenación del Territorio, Francisco Pomares, y de Medio Ambiente, Raúl Jiménez, informó de que quiere impulsar un estudio de detalle de la zona comprendida entre el punto en el que la hiperronda cruza el Guadalhorce hacia el mar. Asimismo, mostró su disposición a colaborar en las tareas de limpieza que se vienen realizando en el río.

Por su parte, Moreno aludió a que la Junta y está redactando otro documento. "Estamos haciendo un estudio para ver posibles soluciones para mejorar la respuesta ante la inundabilidad en el Guadalhorce", precisó. Sobre este asunto, el alcalde también defendió la eliminación del antiguo puente del ferrocarril, algo que será posible en el momento en que se ejecute la pasarela de la senda litoral.

En cuanto a la estación depuradora, desde el Gobierno andaluz se explicó a la representación municipal que se está ultimando la licitación de la asistencia técnica que asumirá la redacción del proyecto final de la infraestructura, con el que se actualizará el documento de 2012. Esta instalación está valorada en unos 70 millones de euros, beneficiará a cinco municipios y tratará 70.000 metros cúbicos diarios. Una vez se cuente con el documento técnico, y siempre que el calendario lo permita, no se descarta la posibilidad de arrancar los trabajos de construcción el año que viene. Al respecto, el propio delegado recordó que existe consignación presupuestaria para ir adelante.

"Es necesario que se tomen con todo interés este tema y sumen los esfuerzos del Estado, que ha ofrecido colaboración", opinó el alcalde, que señaló la idoneidad de que la depuradora cuente con más capacidad y que incluya tratamiento terciario para "dar respuesta a la demanda de agua para los regantes del Bajo Guadalhorce". En materia de aguas, el regidor puso sobre la mesa de la Junta la necesidad de intervenir sobre los pozos de Aljaima para ponerlos en funcionamiento "de forma urgente". Ello permitiría disponer de más agua reservada en los embalses del Guadalhorce, dada la situación de escasez de precipitaciones acumuladas. "Hay que actuar con mucha rapidez en la puesta al día de estos pozos para que aguante más el agua de las presas; hay que tratar de acelerar esas obras", dijo el mandatario local, quien recordó la vieja aspiración de contar con una conducción desde Torremolinos hasta El Atabal con capacidad para unos 600 metros cúbicos por segundo y que, en caso de necesidad, permitiría transportar agua desde la capital hacia la zona occidental de la provincia o viceversa.

Otras actuaciones competencia del Estado y que fueron tratadas por las dos instituciones fueron las mejoras en los sistemas del Guadalhorce con las conducciones y las correcciones de los vertidos salinos, así como el recrecimiento de la presa de La Concepción, en Marbella (Málaga).