El funcionamiento del servicio de urgencias de Churriana es ya una realidad. Desde el pasado 14 de junio se encuentran en plena actividad unas instalaciones que se construyeron en 2008 como un espacio anexo al propio centro de salud y que, desde entonces, no han estado dotadas de personal requerido. Desde el pasado lunes, este espacio cuenta con el equipo sanitario necesario (cuatro médicos, cuatro enfermos y cuatro celadores), ofreciendo asistencia 24 horas al día. 

El consejero de presidencia de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, ha anunciado la instalación permanente de una base del 061. "La apuesta por la Sanidad de este gobierno es incuestionable. Desde hace 13 años se venía diciendo por las presidencias autonómicas anteriores que se iba a abrir este centro, pero ha sido el actual gobierno de la Junta de Andalucía el que lo ha conseguido", ha declarado. También se ha referido la inversión económica que la Junta está llevando a cabo en materia sanitaria: "Uno puede decir que defiende la sanidad pública, pero si no incrementa su presupuesto, no hace nada. Nosotros hemos aumentado el presupuesto de sanidad en 2.000 millones".

El alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, ha destacado "la sensibilidad y rapidez" de la Junta de Andalucía para poner este servicio en marcha, valorando positivamente "la amplitud y modernización" de unas instalaciones que "son garantía de tranquilidad y seguridad" para los vecinos de Churriana. De la Torre ha incidido en que, "pese a que la Covid se acabe marchando", este centro "va a seguir aquí, funcionando" y dando una "respuesta urgente" a las necesidades de los vecinos de Churriana. 

La asociación Las Biznagueras, presente en el acto, ha celebrado la apertura de estas urgencias. "Es una necesidad que llevábamos solicitando mucho tiempo. Un sueño hecho realidad", han afirmado. Desde hace años han estado llevando a cabo actividades vecinales para solicitar la apertura de este centro, con manifestaciones o marchas por el distrito. "En una ocasión llegamos a cortar la calle", cuentan. 

Con el funcionamiento del servicio de urgencias esperan evitar situaciones como la que vivió una de ellas: "Mi padre, con 55 años, sufrió un infarto. Tuvimos que estar esperando dos horas a que llegara la ambulancia. Cuando apareció ya era demasiado tarde. Había fallecido". "No es el único caso, hace poco más de un mes le ocurrió a otro chico joven que también falleció. La ambulancia tardó en llegar más de una hora", añade otra.