Músicos de La Expiración de Málaga denuncian que les rociaron con gas pimienta desde un balcón mientras tocaban

La mayoría de los componentes de la banda acabaron tosiendo, con los ojos irritados y la vista nublada, lo que les obligó a dejar de usar sus instrumentos

Un músico de una cofradía de Benalmádena recibe un botellazo tras recriminarle a un joven el paso entre la banda

Las bandas de Málaga denuncian lesiones a sus músicos y piden prohibir el paso entre la formación

Músicos de la banda de la Expiración de Málaga, ayer durante la procesión de la Virgen de la Caridad / M. G.

Los músicos de la banda Maestro Eloy García de la Archicofradía Expiración de Málaga vivieron este sábado un desagradable episodio que ensombreció la procesión extraordinaria de la Virgen de la Caridad en la que participaban. Una persona, que no ha podido ser identificada, vertió un espray de pimienta sobre los componentes, lo que les provocó, según ha denunciado el tesorero, Pepe Gámez, irritación en los ojos y también en la garganta. Durante unos minutos, tuvieron que dejar de tocar sus instrumentos.

Ocurrió en calle Lagunillas, cuando la formación musical iba a adentrarse en la plaza de la Victoria (Jardín de los monos). "Al tomar la curva, estábamos tocando y, de buenas a primeras, más de la mitad de la banda se puso a toser y le lloraban los ojos", apostilla el portavoz. Reinaba la confusión, pues ninguno de ellos sabía lo que les había ocurrido hasta que uno de los fieles que se encontraba entre el público aseguró haber visto cómo alguien desde un balcón vertía gas lacrimógeno. "Nos cayó a todos los músicos y nos fueron avisando de lo que había pasado", se lamenta el tesorero.

En ese momento temieron, especialmente, por uno de los componentes de la banda, que es asmático. "Gracias a Dios tenía un inhalador en el bolsillo. Nos vimos en una situación peliaguda que se podría haber complicado", sostiene Gámez. En declaraciones a este periódico, recuerda que no supieron "reaccionar bien" y tampoco atinaron a contactar con la Policía para denunciar lo que consideran que ha sido una agresión. El "70%" de la banda se vio perjudicada."Tosían todo el rato...No podíamos tocar con pimienta en la garganta y en los ojos. Los más afectados fueron los que estaban en la parte de atrás tocando maderas, clarinetes y saxos. Tuvieron que dejar de hacerlo porque ni siquiera veían", relata el portavoz de los músicos.

El tesorero considera que fue un momento "triste" porque la banda se dedica a tocar de forma altruista en las procesiones "y con todo el amor del mundo". Lamenta así que haya ciudadanos que le "paguen de esa manera". "Es algo que hacemos desinteresadamente", resalta.

Los afectados todavía siguen sin dar crédito. "Podemos entender que pueda molestar el ruido por una procesión que pasa de noche por el barrio en el que uno vive, pero no tenemos culpa. Hay muchos métodos para buscar una solución que no tiene que ser echarnos gas pimienta", subraya el responsable consultado. Y a renglón seguido, añade que las formaciones musicales son "una parte más de la cofradía", pese a que hay quienes creen "que las procesiones acaban en los tronos", cuando, en realidad, no lo hacen hasta que "pasa el último músico".

La banda de música Maestro Eloy García de la Archicofradía Expiración denuncia las agresiones que suelen sufrir los componentes, y remacha que, si bien ya han sido víctimas de otros incidentes, es la primera vez que les vierten un espray de pimienta. "La gente cruza por mitad de la banda y tenemos que hacer formación de tortuga, incluso cuando estamos tocando, porque no tienen miramientos", recalca el músico, pero más allá de las faltas de "respeto" que soportan se ven sometidos a "lesiones graves", con "labios o cejas partidas". "Por hacer tu hobby nos pueden partir el labio y, si por nuestra propia seguridad pedimos respeto, se nos encaran y tenemos un problema. Ya parece que es un peligro salir a la calle a tocar un instrumento", reconoce.

Un botellazo a otro músico tras recriminar el paso entre la banda

Las bandas de música de las cofradías vienen denunciando este tipo de situaciones desde hace un tiempo. En la Semana Santa de 2023, un componente de la Banda de Cornetas y Tambores del Santísimo Cristo de la Redención fue agredido este Lunes Santo en Málaga mientras tocaba durante la procesión de su cofradía. El suceso se produjo a la altura de la céntrica calle Tejón y Rodríguez, a la altura de un bar. La formación musical, que pertenece a Benalmádena, se encontraba interpretando una marcha cuando un individuo se cruzó entre la banda y, tras ser advertido de que no pasara, acabó lanzando una botella.

El director, Cristóbal Varo, explicó entonces a Málaga Hoy que fue testigo de lo ocurrido. "Yo iba en la esquina derecha y vi cómo se acercaba un chaval. Ya sabía que habría jaleo. Pasó por mi lado tan tranquilo y se metió por en medio de la cuarta fila. Después, quiso andar desde dentro de la formación hasta el fondo y salir por en medio", relató.

Tras ello, los músicos estallaron. En una carta difundida a través de los medios de comunicación, aseguraron que esa semana varios de sus componentes habían sido lesionados por parte de "personas irresponsables" que pasaban por delante de las formaciones, sin tener en cuenta el riesgo que supone para quienes están tocando un instrumento de grandes dimensiones. Aunque la situación, denuncian, no es nueva, el problema se está "agravando" este año "de manera sustancial".

En la misiva reflejaban su "malestar" con los responsables de seguridad de los desfiles, a los que pedían más colaboración "en lo que a seguridad e integridad física" de los músicos se refiere.

2 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último

El extranjero | Crítica

Ozon no puede con Camus