La ausencia de grandes espacios libres en el área metropolitana de Málaga, en la que habitan más de 820.000 personas, es una de las principales obsesiones de los redactores del planeamiento con el que se pretende ordenar este espacio geográfico, que integra trece municipios. Por ello, el documento incluye cinco parques metropolitanos y terrenos para esparcimiento ciudadano, "destinados a conformar la espina dorsal" de este territorio. Los números del POT elevan a 1.116 hectáreas de suelo las destinadas a este fin, con un promedio de 12,78 metros cuadrados de espacio libre por habitante.

Los parques de mayor envergadura son los que se proponen en la desembocadura del Guadalhorce, de 450 hectáreas, y el de Guadalhorce-Nueva Aljaima, de casi 300 hectáreas. A ambos se añaden un espacio asociado al río Campanillas, de 136 hectáreas; el Parque de Monte San Antón, de 89 hectáreas, y el Parque de la Concepción, de 145.

Asimismo, el equipo redactor, encabezado por Manuel González Fustegueras, plantea otros espacios sobre los que se defiende su mantenimiento como suelo no urbanizable. En este capítulo están el parque fluvial central del río Guadalhorce, que permite la conexión de Cártama y Málaga y las sierras de Mijas y de Campanillas, y el asociado al arroyo del Valle. En todos los casos, el plan insiste en la necesidad de que sean "intervenciones blandas, con lo que la implantación de redes de urbanización debe limitarse a las necesarias para asegurar el acceso de la población".

El POT también delimita un corredor marítimo-terrestre, en el que se integran los suelos aún no ocupados y aquellos susceptibles de ser destinados a sistemas de espacios libres públicos y equipamientos. En esta franja se ubican las instalaciones náuticas existentes, para las que se propone su mejora y ampliación, con el fin de aumentar el número de atraques. Lo que no hace el estudio es proponer ningún puerto deportivo nuevo, aunque admite "de forma excepcional" que se pueda autorizar la construcción de alguno.

Junto a la dotación de espacios públicos, la otra gran obsesión de los responsables del planeamiento metropolitano ha sido el dar respuesta ala carencia de suelos donde construir viviendas a precio asequible. Es por ello que el mapa del área metropolitana pasa a incluir cinco grandes bolsas de terreno en las que de los pisos que se levanten un 60 por ciento deberá ser protegidos. En Málaga capital se dibujan dos reservas, una en Soliva-Lagar de Oliveros, con 200 hectáreas, y Campanillas, con 126. Asimismo, el municipio de Alhaurín de la Torre acoge otra de 160 hectáreas, como también lo hace Cártama, de 156 hectáreas, y Álora, de 20 hectáreas. Los datos previos apuntan a que las actuaciones que se impulsen en estas pastillas permitirán la ejecución de más de 13.000 VPO.