Málaga

Temperaturas altas antes de 'la vuelta' del barro

  • Los termómetros superan los 25 grados, aunque hoy se espera que regresen las lluvias y las tormentas

Un grupo de jóvenes, ayer, con flotadores en el Paseo del Parque.

Un grupo de jóvenes, ayer, con flotadores en el Paseo del Parque. / javier albiñana

La masa de aire cálido que sobrevoló ayer la provincia hizo subir los termómetros hasta máximas de 25 grados, una cifra que queda muy por encima de la tendencia histórica del mes de abril. Según indicó a este periódico ayer el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), José María Sánchez-Laulhé, la media de este mes se sitúa en 21.4 grados, dos por debajo de la temperatura que registró a lo largo de la mañana en la capital, cercana a los 23 grados, y más de cuatro menos que la máxima esperada.

La ausencia de nubes durante gran parte del día fue la causa de la subida de las temperaturas que los termómetros registraron ayer en Málaga. También es el motivo por el cual hoy no se volverán a repetir esas cotas. Los próximos días, los cielos contarán con la presencia generalizada de intervalos nubosos que harán bajar las máximas hasta los 20 grados, aunque dejarán las temperaturas mínimas altas en torno a los 15.

La previsión para hoy apunta a cielos cubiertos con chubascos que ocasionalmente irán acompañados de tormentas y que se intensificarán durante la tarde, con especial atención al margen entre las 17:00 y las 18:00. La dana que sobrevuela el norte de África volverá a afectar a la provincia con precipitaciones que podrían dejar entre dos y 15 litros por metro cuadrado y que, posiblemente, al igual que las que cayeron el pasado lunes, vendrán acompañada por polvo y el consiguiente barro en calles y coches. El viento, por su parte, soplará flojo, de dirección variable en el interior y de componente oeste en el litoral.

La inercia de los termómetros, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología, podría romperse el próximo domingo, para cuando se espera una bajada definitiva de temperaturas e, incluso, nuevas precipitaciones, aunque aún el pronóstico no es fijo.

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