Bandera amarilla en 13 playas de Málaga: todas menos La Malagueta y La Caleta

Ayer fueron la medusas y este sábado, el viento. La bandera amarilla ondea en prácticamente todas las playas de Málaga capital, según se detalla en la información publicada a través de la aplicación móvil Málaga Funciona, gestionada por el Ayuntamiento, que permite consultar en tiempo real el estado de las playas y otros servicios públicos. Se pide precaución a los bañistas en El Dedo, El Candado, Baños del Carmen, Fábrica de Cemento, San Julián, El Palo, El Peñón del Cuervo, la Araña, Guadalmar, La Misericordia, Pedregalejo, Sacaba y San Andrés. De esta advertencia solo se libraba por la mañana La Malagueta, que tiene bandera verde y a la que más tarde se ha sumado La Caleta.

Aunque no hay una prohibición expresa para el baño (lo que se establece con la bandera roja), las autoridades sí recomiendan evitar entrar en el agua y, en caso de hacerlo, extremar la precaución. El aviso no se emite por la presencia de medusas, como sucedió en la jornada de este viernes, sino presumiblemente por el oleaje y vientos costeros.

Fuera de la capital las condiciones meteorológicas para el baño tampoco mejoran. Según la previsión para las playas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), hay oleaje moderado en casi toda la provincia de Málaga y el viento sopla con intensidad en muchas zonas. En concreto, es fuerte en la parte oeste de la capital y en la Costa del Sol entre Torremolinos y Marbella. En el extremo este del litoral de la capital los vientos son más flojos, hasta las playas de Rincón de la Victoria; mientras que en el resto del litoral de la Axarquía son moderados.

Presencia de mesusas

Este viernes se tuvo que izar la bandera amarilla en nueve playas de la capital por la presencia de medusas, y el fuerte viento obligó a elevar la bandera roja en varias playas del Rincón de la Victoria. Por el momento, no se han avisado ejemplares de medusas este sábado.

En el caso de observarlas, se recomienda extremar la precaución y evitar el baño. Tampoco se aconseja tocar o sacar del agua a estos invertebrados, aunque estén muertos varados en la arena.

El biólogo y socio fundador del Aula del Mar, Juan Jesús Martín, explicó que la aparición de medusas en la costa en estos meses responde a factores naturales, pero sobre todo azarosos: “Lo que pasa es que las medusas están durante todo el año en el mar, pero cuando coinciden con los bañistas es ahora, claro, que en invierno ahí no nos enteramos”, explica el experto. “Ellas viven normalmente en mar abierto y tienen una capacidad de movimiento muy reducida. Se dejan llevar por las corrientes, y cuando el viento las empuja hacia la orilla, llegan, no pueden seguir y se acumulan”.