24 horas han transcurrido sólo desde la última incidencia ferroviaria cuando este domingo, en plena temporada turística, de nuevo Adif reporta nuevas complicaciones en el tráfico ferroviario. Desde poco antes de la 1 de la tarde, los trenes de media distancia y de Cercanías de las líneas C-1 (Málaga-Fuengirola) han permanecido detenidos en estaciones y apeaderos por una nueva complicación ferroviaria. La C-2 tuvo que ser suspendida. Las líneas que se vieron afectadas son las que unen Málaga y Álora, después de que haya sido restablecida la circulación entre Álora y Campanillas. Los pasajeros que viajaban desde Sevilla a la capital han sido reubicados en un AVE a la altura de Antequera.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) informó poco antes de las 14:30 de que ya había sido solventada la incidencia en la infraestuctura a la altura de los Prados, de modo que quedaba restablecida la circulación habitual. Y, así, el servicio se normalizaba, según Renfe, en todo el recorrido.

La entidad pública empresarial había informado a través de su perfil en la red social X de que "debido a una incidencia en la infraestructura no era "posible la expedición y recepción de trenes de Cercanías Málaga-Fuengirola". En una actualización posterior precisaba que en los Cercanías de las líneas C-1 había "rotaciones selectivas en Aeropuerto" y que la C-2 de Malaga se encontraba suspendida.

Desde Renfe, por su parte, han señalado que los trenes de Media Distancia que unen Sevilla con Málaga quedaron suprimidos en Santa Ana, en Antequera. Los pasajeros afectados tuvieron que ser transbordados en un AVE, a fin de poder "garantizar el viaje hasta su destino".

Más retrasos

En cuanto a los trenes de Cercanías de la línea C-1 circularon con retrasos medios estimados de 20 minutos. La circulación se fue "normalizando de manera paulatina". También la línea C-2 acumuló retrasos, en su caso de unos 90 minutos.

Es el día de la marmota de Adif. La última incidencia se produjo este mismo sábado, en el entorno de La Sagra, en la provincia de Toledo, el mismo punto en el que se inició un auténtico caos ferroviario hace dos semanas, entonces por un fallo de tensión en la catenaria tras quedar detenido un tren Ouigo. Esta vez, se registraron retrasos en trenes entre Málaga y Madrid. Hacia las 5 y media de esta tarde, fuentes de Renfe aseguraron a este periódico que el problema ya había quedado "solventado" y que se recuperaba "la circulación habitual paulatinamente".

Adif, titular de la infraestructura, había indicado a través de la red social X que "una incidencia en el sistema LZB, que dificulta el control del tráfico ferroviario entre La Sagra y Mora", estaba causando retrasos en los trenes de alta velocidad del sur y los de Castilla la Mancha.

La Sagra, el punto negro en Toledo del tren entre Málaga y Madrid

La línea ferroviaria que une Madrid con Andalucía cuenta con su particular Triángulo de las Bermudas. Un punto negro que concentra accidentes, averías y casi una serie de catastróficas desdichas. A poco que se consulte la hemeroteca se pueden contar múltiples pérdidas de electricidad en la catenaria, caídas de esta por el fuerte viento, un robo de cable tachado por el ministro de Transportes como "sabotaje", danas que inundaron las vías, trenes parados en pleno verano por problema en el aire acondicionado o, incluso, una gran tormenta en pleno agosto que paró las comunicaciones.

Desde Adif, como titular de la infraestructura, vienen precisando que este punto de La Sagra-Toledo no debería ser más conflictivo que otras zonas. Admiten, sin embargo, que el tramo de la línea de Alta Velocidad entre Madrid-Puertollano-Córdoba es el que más trenes soporta, especialmente entre La Sagra y Mora, un punto que cruzan todos los trenes que suben o bajan entre Andalucía y Madrid, incluidos los AVE, Alvia y Media Distancia de Ciudad Real y Puertollano. Intensidad de paso que se ha visto reforzada con la liberalización del mercado y el aporte de Avlo, Iryo y Ouigo de nuevas frecuencias. El mayor uso implica mayor concentración de las averías aquí.