El Málaga CF ha elegido el camino de la unidad, del cierre de filas alrededor del entrenador y su cuerpo técnico. Mensajes de puertas hacia fuera y de puertas hacia dentro, incluso con el desagradable capítulo de las pintadas. Pero todo eso no servirá de nada si no es capaz de mostrar en el verde otra cara y regresar de su visita al CD Tenerife (21:00 horas) con un triunfo que temple los ánimos hasta el encuentro contra el Villarreal B, que ante el público de La Rosaleda podría llegar a ser otro juicio sumarísimo.

Pablo Guede salió a la rueda de prensa previa al viaje con una sonrisa, bromeando, buscando complicidad con los presentes. No quiere distracciones ni pensar que se la juega, aunque esté flotando en el ambiente. Sabe que su suerte depende de que el balón empiece a entrar y las derrotas se conviertan en victorias, el único bálsamo posible para lograr recuperar el favor de su afición.

Está en las botas de los jugadores. El argentino convocó a 23 futbolistas, aunque no son exactamente los que desearía. Bustinza fue la noticia positiva de la semana, un regreso que podía dar algo de oxígeno en el centro de la zaga, pero se cerró con molestias de Juande Rivas y la baja segura de Andrés Caro. Por eso se lleva a Moussa Diarra entre los expedicionarios, junto a otros canteranos entre los que destaca el regreso de Dani Lorenzo, que también se recuperó recientemente.

Así que las principales dudas están en la defensa. Si Bustinza y Juande están bien deberían formar la pareja titular, pero Escassi –el elegido en Huesca– tiene sus opciones. Para completar los protectores de Manolo Reina, Juanfran Moreno y Javi Jiménez. Por delante estará Alfred N’Diaye, de quien se espera que dé otro paso adelante y comience a ejercer casi como un líder.

Luego está el ataque. Hasta ahora ha tendido a juntar en punta a Rubén Castro y Fran Sol, eso deja tres puestos a repartir para cubrir la línea de medios ofensivos. Aleix Febas y Álex Gallar también han sido primeras opciones para Guede, que en El Alcoraz tiró de Villalba. Si mantiene el 4-4-2, podrían repetir.

Enfrente estará el Tenerife, un equipo que siempre apuesta fuerte y aspira al ascenso, al que tampoco le ha ido demasiado bien en el inicio de temporada. Con cuatro puntos la gente empieza a ponerse nerviosa en el Helidoro Rodríguez López con Ramis y los suyos. En los chicharreros, entre otros, está Appiah, un futbolista que el Málaga pretendió para reforzar sus bandas.