Este formato con el que se acabará la temporada beneficia a los más perjudicados en cuanto a minutos este curso. La nueva normalidad, el nuevo fútbol con dos jornadas por semana da pie a las rotaciones y a las oportunidades, exigidas en parte por la acumulación de minutos que se pueden dar en las piernas de los futbolistas de la categoría. En el Málaga, dos partidos ya dan cuenta de ello.

En dos duelos, de la comprimida plantilla de Sergio Pellicer –canteranos a parte–, tuvieron minutos 18 jugadores diferentes –cinco de ellos con ficha del filial–, aunque el técnico castellonense confiara prácticamente con el mismo bloque de inicio en ambos encuentros ante Huesca (1-3) y Tenerife (0-0). Cifu por Ismael y Diego por Mikel, fueron las dos únicas modificaciones que se hicieron de un once a otro. Solo Munir y Juankar sumaron los más de 180 minutos que se jugaron entre La Rosaleda y el Heliodoro.

Así es el nuevo fútbol o al menos esto exige si se quieren prevenir sobrecargas y lesiones ante la acumulación de minutos. La nueva normalidad permite a ciertos futbolistas tener oportunidades que en otras circunstancias quizás no las hubieran tenido. Los cinco cambios abren el abanico de un Sergio Pellicer que ya ha dado minutos a los poco habituales.

Minutos para Mikel, Iván, Boulahroud, Rolón...

Sorprendía quizá ante el Huesca la titularidad de Cifu, tras haberle ganado Ismael el sitio los meses venideros al confinamiento, previos al obligado parón. La lesión de Luis Hernández, oportunidad para Diego. De inicio era lo único que arrojó un aroma diferente ante los oscenses aunque con el transcurso del encuentro tomaron sitio hombres como Mikel, tras cinco meses en el ostracismo, o se daría el ansiado debut en competición liguera de Iván Jaime, que sí debutó en Copa del Rey, aunque fueran apenas cinco minutos.

Señalados Cifu y Diego, en Tenerife llegaron más oportunidades para Mikel y se devolvía su lugar a Ismael Casas. La expulsión de Keidi Bare condicionaría lo que vendría después, pero llegaron más opciones de sorprender y agradar para jugadores más atípicos. Boulahroud aparecía tras el descanso para dar relevo a Juanpi y reforzar la medular, así como minutos casi seis meses después para Estaban Rolón en la recta final del encuentro –no jugaba desde el 17 de diciembre ante el Escobedo en Copa del Rey; en Liga desde el 12 de octubre–.

Cabe destacar también la presencia de Sergio Buenacasa, el cual parece haber dejado a un lado sus problemas con las lesiones y gana enteros como sustituto de Sadiku. Si ante el Huesca fueron 20 minutos, ante el Tenerife se le otorgó media hora. Es previsible que, con tal acumulación de partidos en pocas semanas, tenga que relevar durante todo un partido al albanés.