Se incorporó Orlando Sá al grupo después de un paréntesis breve por unos problemas musculares. La paciencia será clave con este veterano delantero que se guardó en la cita contra el Granada del pasado domingo. El portugués tiene que ser un futbolista importante para el Málaga, por eso se precisa de paciencia.

Con el trabajo de pretemporada en las piernas, este tipo de molestias son el pan de cada día. En el caso de Sá hay que contar con el añadido del tiempo que lleva sin competir. La cuestión es no precipitarse y evitar males mayores. Habrá que ver si puede estar ante Espanyol y Alcorcón esta semana.

Otro hombre del que está pendiente Pellicer es Cristo. El lateral izquierdo también arrastra molestias y el club decidió someterle a una resonancia que determine el alcance real de su dolencia y a partir de ahí ver cómo actuar. Escasean las opciones del Málaga en el flanco zurdo, donde se espera algún refuerzo.

Mientras tanto, el conjunto malacitano continúa su estadía en Alhaurín El Grande a la espera de que el equipo vaya cogiendo forma.