Cruzan los dedos en el Málaga después del brote de Covid aparecido en el vestuario blanquiazul y que, según comunicó oficialmente la entidad, afectó a seis de sus componentes. El equipo tiene que regresar a los entrenamientos en la tarde de este lunes con la incertidumbre de si se conocerán nuevos casos tras la vuelta de las vacaciones navideñas.

Según la versión oficial, los afectados no sufren grandes síntomas o son directamente asintomáticos, lo cual se celebra, pero la nueva variante está demostrando una mayor capacidad para contagiar, por lo que no se descarta que después de las pruebas PCR a las que tendrán que someterse varias horas antes de que dé comienzo la sesión.

Era lo que le faltaba a un Málaga muy mermado por las lesiones en esta primera vuelta y que tendrá que tirar de jugadores de La Academia para poder completar el grupo en las próximas sesiones. Además de lo que le quita y puede quitar el Covid, José Alberto López ya tenía en la enfermería a un núcleo de jugadores importantes: Luis Muñoz, Juande, Ramón, Jozabed, Kevin, Paulino (neumonía), Hicham y Sekou (tocado). 

Todo se mezcla justo en el peor momento deportivo de la temporada, con parte de la afición discutiendo al técnico y una sanción de la FIFA que todavía no está levantada. El Málaga visita el próximo lunes 3 de enero al Alcorcón, un partido en el que sólo le sirve el triunfo. No estará, para más inri, Brandon Thomas, que cumplirá un encuentro de suspensión por acumulación de amarillas.