La expulsión de Yanis Rahmani ante el Logroñés fue un despropósito, pero la cuestión no era el daño sufrido en esa misma cita por el Málaga. El temor era perder al extremo francés por más tiempo. Estaba la reciente experiencia de Caye Quintana, que precisamente no participó en dicho encuentro por tener que cumplir el segundo partido de suspensión después de ver la roja ante el Lugo.

Era bastante discutible la roja que vio ante los riojanos el hábil futbolista cedido por el Almería. Nuevamente el VAR hacía de las suyas y perjudicaba seriamente al Málaga. Se esperaba cualquier cosa pero finalmente el Comité de Competición decidió sancionar a Yanis con un único partido de castigo. Puede dar con un canto en los dientes porque podrían haber llegado a ser hasta tres.

De este modo se pierde la primera cita de 2021 ante el Albacete. Una baja importante para el Málaga, que duda cabe, que todavía puede apurar sus opciones y acudir al Comité de Apelación, pero difícilmente servirá para algo. El chico, de todas formas, se lo toma con mucha filosofía. Esto decía el lunes: "Cuantos más obstáculos en el camino, más valor tendrá la recompensa A volver más fuerte y con más hambre que nunca".

Una lástima que Rahmani tenga que despedir así el año natural, tan bonito para él en el capítulo deportivo. El futbolista ha cerrado un 2020 fabuloso. Lo empezó en el Lugo y lo termina en el Málaga. Entre ambas experiencias ha sumado ocho asistencias de gol, lo que le sitúa como el mejor asistente de Segunda División y además entre los diez mejores de toda Europa en su categoría.