La Policía Local de Marbella realizará a partir del próximo 1 de julio controles diarios con motivo de la campaña especial de verano de vigilancia contra el intrusismo en el sector del taxi. Según detalló ayer el portavoz del equipo de gobierno y concejal de Tráfico y Transportes, Félix Romero, los controles se realizarán principalmente en las zonas de mayor afluencia turística, como hoteles, centros comerciales y zonas de ocio, campos de golf, clínicas y eventos, entre otros. La unidad policial encargada de realizar estos controles estará formada por un total de 14 agentes (dirigida por el inspector Ricardo del Río, cuatro oficiales y nueve agentes), que trabajarán en consonancia con otros 145 que estarán en la calle, a disposición de la unidad para atender todas las instrucciones que puedan surgir. En total, se han formado a 159 agentes especializados en el control a los Vehículos de Transporte Concertado (VTC).

La labor de estos agentes especializados se centrará en distinguir las modalidades de transporte, realizar el protocolo previsto en cada una de las inspecciones de los vehículos, así como dotar de un fondo estadístico a la unidad. Asimismo, se inspeccionará la documentación del vehículo parado y, en caso de encontrarse ante una situación de infracción, la Policía Local facilitará a los pasajeros un taxi para su traslado. "Para nosotros será vital causar el menor perjuicio posible al pasajero en el tiempo que dure la inspección", indicó el edil.

Romero aseguró que estos controles especiales se irán realizando durante un periodo de diez días a razón de dos controles diarios en algún lugar del término municipal. "Para el Ayuntamiento es vital la apuesta por el transporte público, la movilidad de una ciudad es la imagen que se proyecta a los visitantes, por lo que queremos que el control y la vigilancia contra el intrusismo se vea claramente reflejado", destacó. De hecho, la unidad policial encargada de esta labor ya está funcionando y en los últimos meses se han tramitado más de una veintena de expedientes sancionadores, cuyas multas tienen una cuantía mínima de 1.800 euros cada una. "Cualquier actuación que se salga de esa licencia municipal es una actuación que en muchos casos puede ser delictiva ya que no cuenta con el aval del Ayuntamiento que es quien da las licencias del taxi", aseveró. "Nuestro objetivo es perseguir y minimizar el uso y la actividad de los llamados taxis piratas porque trasladan una imagen de inseguridad y no es una imagen digna de una ciudad como Marbella", agregó Romero.

Según recordó el edil, la unidad que combate el intrusismo en el sector del taxi en el municipio se creó en el año 2014 con dos agentes y un año más tarde se inició la formación de los agentes en este ámbito.

Por otro lado, Romero anunció que la Junta de Gobierno Local aprobó ayer tres licencias de obra por importe de cuatro millones.