El diestro Luis Miguel Encabo, herido de carácter "muy grave" el pasado domingo en la plaza de Alcalá de Henares, ya ha abandonado la UVI del hospital Príncipe de Asturias de dicha ciudad, pasando a una habitación de planta, donde ayer por la mañana pudo dar "un corto paseo para ejercitar la pierna. Un ejercicio muy doloroso, pero recomendado por el médico".

El mismo Encabo explicó ayer que "la recuperación va a exigir mucho sacrificio, pero sorprendentemente está siendo más rápida de lo que se esperaba. Tampoco pensamos que la cornada era tan grande y, sin embargo, lo fue. Las cosas hay que afrontarlas como vienen. Con los médicos y la ayuda de Dios vamos para adelante". Una cornada "muy fuerte" en la pierna izquierda, de tres trayectorias, que, según el parte facultativo, contunde y diseca la arteria, vena y nervio femoral en unos cinco centímetros, además de provocar "serios destrozos musculares, con los abductores reventados". Pero el torero empieza a mirar al futuro, haciendo planes incluso para volver a torear lo antes posible.

"No sé qué dirán los médicos, pero yo quiero estar para la Feria del Pilar de Zaragoza. Y si pudiera ser antes, mejor. Voy a seguir las pautas que marquen ellos, aunque poniendo mucho de mi parte para acelerar la recuperación, y en consecuencia adelantar la reaparición", insistió Encabo.