Protestas a Bruselas y al maestro armero

Sánchez se reserva el principal trozo del pastel. Las autonomías demandan su porción y los ayuntamientos las migajas

Qué hará la alcaldesa de Atajate para conseguir los 42.090 euros que, según mis cálculos, le corresponden de la partida de 2.117 millones que el Gobierno central transferirá a la Junta de Andalucía de los fondos europeos Next Generation? Como el criterio que se demanda para distribuir el dinero es el de la población, también la pequeña localidad de la serranía rondeña deberá exigir lo que le corresponde por sus 169 habitantes.

La partida puede ser importante para cambiar la dinámica demográfica. Los últimos datos publicados por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía reflejan que en 2020 en la localidad no se celebró una boda y tampoco nació un niño. Y murieron dos personas. Igual se pueden subvencionar un buen puñado de banquetes nupciales para darle alicientes a futuras parejas. Aunque la edad media de la población asciende a 48 años, plena juventud en este siglo XXI. La web oficial de la Unión Europea refleja que la cuantía principal de sus fondos será para "cohesión, resiliencia y valores". Encajan los tres como un guante.

Como la alcaldesa es socialista, supongo que le hará caso al subdelegado del Gobierno en Málaga que, molesto porque los obedientes regidores de la capital y Rincón han acudido -organizados por el PP- a Bruselas a quejarse por el reparto, les ha conminado a que protesten al maestro armero. En este caso, al de San Telmo, en Sevilla. Qué sabio fue Felipe V al crear esa figura en 1700 para que tres siglos después continúe vigente cuando hay que despejar un problema, ahora con Felipe VI.

El Gobierno proclama que estamos ante una oportunidad histórica. 70.000 millones para transformar España. Se reserva el trozo principal del pastel, pero más allá de pomposos epígrafes como digital y verde, Sánchez es tan discreto que no tenemos la más remota idea de cómo lo repartirá y en qué. Las autonomías sacan su calculadora y exigen a Moncloa su buena porción y ahí están los ayuntamientos para disputarse también las migajas.

A veces hay pistas. El secretario de Estado de Turismo anunciaba esta semana que a Vélez le han caído casi 3 millones para, entre otras cosas, embellecer su casco histórico y poner bicis eléctricas. Y a Marbella 5. Su palacio de ferias será "sostenible". Dos elegidos entre 500 proyectos presentados. ¿Cómo serán los que han rechazado? Con ese goteo no resurge España sino el plan Zapatero. Al turismo hay que garantizarle el agua. Cada dos por tres las administraciones prometen interconectar los pantanos, recrecer alguna presa, modernizar los riegos y depurar para preservar los pantanos en sequía. Menos mal que están en marcha la Economía Circular y la Revolución Verde. Porque encontrar al maestro armero en Bruselas no será fácil.

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