El Ministerio de Transición Ecológica ha anunciado la adjudicación de los trabajos de construcción de la depuradora y colectores de Jimera de Líbar, una actuación que contará con un presupuesto de 3,2 millones de euros.

Un total de 16 empresas presentaron sus ofertas para optar a este proyecto, siendo elegida la Unión Temporal de Empresas (UTE) Medio Ambiente Residuos y Agua Marea-Campoamor. Unos trabajos que cuentan con un periodo de 12 meses para su construcción y 6 meses para la realización de las pruebas.

La nueva depuradora tiene capacidad para tratar las aguas residuales que puede generar una población de 1.116 habitantes, por lo que contará con un importante margen para poder atender para la población de este municipio que, aunque no alcanza en estos momentos las 400 personas, cuenta con una destacada actividad turística y existen un importante número de segundas residencias.

Además, desde Aguas de las Cuencas de España, empresa pública encargada de estos proyectos junto a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y la Diputación de Málaga, también se informó que se había aprobado la licitación del proyecto para la construcción de la depuradora de Cortes de la Frontera y El Colmenar, una actuación que conllevará una inversión de 9,9 millones de euros.

En este caso las instalaciones tendrán capacidad para atender a una población de 6.217 personas y contarán con una serie de colectores de 6.766 y 1.262 metros, respectivamente. Una depuradora que permitirá tratar las aguas residuales que se están vertiendo en estos momentos en la zona baja de la cuenca del río Guadiaro.

Por otra parte, las obras de la depuradora y colectores de Arriate han sido adjudicadas ya por 4,9 millones de euros, estando previsto que las obras se inicien en los próximos días.

De este modo, solo queda pendiente la resolución del proyecto para la construcción de la depuradora de Benaoján y Montejaque, aunque este proyecto se encuentra todavía pendiente de evaluación ambiental. Y es que la ubicación elegida provocó el rechazo de un grupo de vecinos y también desde Silvema-Ecologistas en Acción han presentado alegaciones al mismo, al consideran que tendría una importante afección sobre una zona natural protegida. Además, sostienen que podría afectar a cerca de 100 árboles centenarios y diversas vegetación de valor ambiental, por lo que piden que estudien alternativas a la ubicación elegida inicialmente.

Incluso se estudia poder llevar este asunto a los tribunales si desde el Gobierno central se opta por mantener la ubicación elegida inicialmente y que cuenta con el respaldo del Ayuntamiento de Benaoján, en cuyo termino municipal se situaría.