Las organizaciones agrarias ASAJA, Coag, UPA y la Asociación de Cooperativas Agracias han mantenido en Málaga una nueva jornada de protestas para exigir al Gobierno de España y a la Unión Europea que se adopten las medidas necesarias para acabar con la competencia desleal de terceros países, se intensifiquen los controles fitosanitarios en los puertos y alivie la presión que los agricultores aseguran que se está ejerciendo sobre el campo y que hacen que su actividad sea inviable o no rentable.

Una veintena de tractores y agricultores a pie mantuvieron cortada la carretera A-357 que une Málaga con Ronda y Campillos a la altura del cruce de Zalea (Pizarra) desde las 10:00 hasta algo después de las 13:00  permitiendo el pasado alternativo de los turismos y vehículos de emergencias. Una protesta que se desarrolló con normalidad y tan solo que produjo un pequeño incidente cuando uno de los camiones que se encontraban parados emprendió la marcha, lo que provocó la reacción de los agricultores que movieron sus tractores y volvieron cortar totalmente el tráfico. Tras la mediación de la Guardia Civil volvía la normalidad y continuó el paso alternativo de turismos y vehículos de pequeñas dimensiones.

Los agricultores malagueños insistieron en la situación insostenible que viven en sus explotaciones y lamentaron la falta de apoyo por parte del Gobierno español. "Si se tiene que sentar el presidente del Gobierno, que se siente", señalaban. Y es que lamentan la falta de avances importantes en las negociaciones que se están manteniendo con los responsables del Ministerio de Agricultura.

Tractores bloquean el pasado de camiones.

Además, hicieron especial hincapié en la competencia desleal que se está ejerciendo por parte de terceros países y alertaron sobre los riesgos para la salud de los consumidores que consideran que puede tener la llegada de estos productos sin que se realicen controles fitosanitarios mucho más exhaustivos. "El tema de las fresas procedentes de Marruecos en el que se detectó hepatitis A es solo la punta del Iceberg", apuntaba el secretario provincial de Coag, Antonio Rodríguez. Además, aseguró que "la falta de controles en los puertos es la ruina de los agricultores y el envenenamiento de los ciudadanos".

En este sentido, el presidente de ASAJA Málaga, Baldomero Bellido, aseguró que existen 48 productos de Marruecos que se encuentran en investigación y lamentó que tan solo sobre un 5% de los productos que llegan a España sean controlados.

Además, también anunció que "mientras no consigamos algo vamos a seguir en la calle", al tiempo que rechazó las "obligaciones absurdas" que consideran que se han impuesto sobre el sector desde la Unión Europea.

Por otra parte, reclamó al Gobierno central que acometa las actuaciones necesarias para garantizar el abastecimiento de agua para la agricultura. "Hemos visto que se dijo que se garantizaría el agua para el sector turístico, nosotros también queremos", dijo Bellido, que insistió en la necesidad de construir infraestructuras hídricas que permitan almacenar el agua y que no termine en el mar. "No solo tiene que llover, tenemos que tener infraestructura para almacenarla", señaló.

Agricultores bloqueando la carretera.

Por su parte, Francisco Moscoso, responsable de UPA en Málaga, también pidió a los ciudadanos que miren los lugares de origen de los productos que encuentran en los lineales de los supermercados, al tiempo que aseguró que "no vamos a parar".

Durante la protesta se insistió en la necesidad de contar con el apoyo de la población en este asunto. "Tenemos que tener al ciudadano de nuestra parte", señalaban, por lo que anunciaron que seguirán realizando protestas autorizadas y que ocasionen los menos daños posibles a los ciudadanos.

Además, también se apuntó a que se trata de una lucha en la que no solo se están defendiendo los intereses de los agricultores y sostuvieron que también se está buscando garantizar que los ciudadanos consuman productos de calidad.

Entre las reivindicaciones que han llevado a este sector a salir a las carreteras y calles, no solo de Málaga sino de todo el territorio nacional, están rebajar las exigencias de la nueva PAC agroambiental, que reducen drásticamente las producciones. También piden rebajar la carga burocrática que hace perder muchas jornadas de trabajo y exige una mayor implicación del funcionariado. Los agricultores también piden que no sea obligatorio dejar un 4% de la superficie en barbecho. Quieren eliminar los libros digitales: la Unión Europea exige a los productores que lleven un cuaderno digital donde deben anotar trabajos, tratamientos, manejo de animales, etc. Estas son solo algunas de las peticiones de agricultores y ganaderos al gobierno nacional y al europeo.