La cofradía de los Estudiantes de Antequera volvió a sorprender a los numerosos visitantes que acuden a disfrutar de la Semana Santa de Antequera. La enorme belleza y rareza de sus imágenes hacen que sean un procesión muy diferente a otras que se puedan ver. A las 17:30 comenzaba el desfile de la armadilla que se encarga de anunciar por las calles de la ciudad el próximo inicio de la estación de penitencia.

Tras ello, oración en el interior del templo, que dejó paso al intenso humo del incienso que al abrirse las puertas de la iglesia de San Francisco dejaba entrever la majestuosidad de los las imágenes que porta esta cofradía en sus tronos.

El Cristo Verde y el Señor de la Sangre, que procesiona bajo palio, componen dos de las imágenes más significativas de la Semana Santa antequerana. El primero por su especial color, mientras que el segundo es una de las pocas imágenes de Cristo que procesiona bajo palio, y única que lo hace en Antequera. Además, se da la particularidad que la imagen del Cristo Verde que procesiona esta cofradía es la más antigua de la Semana Santa antequerana.

Una salida de ayer en la que el buen tiempo también acompañó y los alrededores del templo se llenaron de público para ver la salida de los Estudiantes en un marco monumental que también aporta un extra a patrimonio que la cofradía pone en la calle.

Los aplausos del numeroso público resonaron a las puertas del templo tras la salida de los tronos y los primeros arriba que realizaron los hemanacos, como se conoce a los hombres de trono en la ciudad del Torcal.Junto a ambos cristos procesionó también la imagen de la Virgen de la Vera Cruz, una dolorosa con una rostro de gran fuerza plástica.

Tras la salida tocó emprender el camino por las calles del centro de Antequera para la única hermandad que ayer realizó estación de penitencia. Los Estudiantes daban continuidad así a la salida de la Pollinica con la que arrancó la Pasión antequera.

Un Lunes Santo que hoy dará paso al Martes Santo, día reservado para la salida procesional del Señor del Rescate desde su templo trinitario. Un Cristo que cuenta con una gran cantidad de devotos que le acompañan a lo largo del recorrido alumbrándole con velas, lo que hace que el fervor tome las calles de la ciudad del Torcal.