La lluvia de primera hora de la tarde obligó a configurar un nuevo Martes Santo en Vélez. La Comisión de Aguas tomó la decisión poco antes de mediodía para tratar de que las hermandades lucieran sin riesgo. Así, se acordó que Ecce-Homo retrasase su salida a las 18:30 horas, aunque finalmente no procesionó hasta cerca de las nueve de la noche. Aún así les pilló la lluvia y sólo pudo quedarse en su barrio.

Consiguieron hacer el acto frente al cuartel de la Guardia Civil pero no pudieron llegar a la rotonda de Capuchinos como pretendían. Alrededor de las once y media de la noche llegaron a su templo para celebrar la “Madrugada del Perdón” – adelantada por la lluvia - para la que este año estaba destinada Inmaculada Herrera, primera teniente hermana mayor y jefe de trono de la Virgen del Amor.

El Coronado de Espinas salió pasadas las nueve de la noche y también tenía previsto acortar recorrido, subiendo directamente por calle Las Tiendas. Cuando llegó la lluvia estaban en Felix Lomas apretaron el paso por calle Juan Barranquero. Era poco antes de las once de la noche.

El Coronado de Espinas durante el encierro

Los Dolores retrasó su salida hasta las 21 horas y además suprimió algunas calles para recortar metros. Una vez entrada a calle Salvador Rueda, la popular “calle Coroná”, tomarían directamente calle Félix Lomas sin llegar a la plaza San Juan de Dios. Sí pudo reencontrarse con su Cristo, el Dulce Nombre de Jesús, a las puertas de la iglesia de San Juan.

La lluvia regresó a Vélez - Málaga poco antes de las once de la noche provocando el regreso precipitado de las hermandades

No pudo ser el Martes Santo deseado, aunque el mal tiempo no impidió que la Cofradía de Nuestro Padre Jesús en su Presentación al Pueblo “Ecce-Homo” y María Santísima del Amor estuviese arropada por los vecinos “del barrio” en su salida procesional después de dos años. En esta ocasión, los características pebeteros del Cristo fueron encendidos con la “Luz de la Paz de Belén” traída a Andalucía por el grupo Scouts de la Parroquia de San José, sede canónica de la cofradía. Ellos fueron quienes se las entregaron a los efectivos del Consorcio de Bomberos que son los encargados de hacerlos todos los años.

Tras este emotivo acto y a los sones de la Agrupación Musical María Santísima de la Estrella de Granada cruzó el dintel del templo para recorrer su barrio. La lluvia no le permitió más.

El Cristo estrenó este año el juego de potencias en plata de ley sobredorada por el orfebre Jesús de Julián con diseño de Israel Cornejo. La Virgen del Amor, dos ángeles para su trono realizados por el escultor imaginero José Antonio Lucena Martín.

Como curiosidad, el “Señor de la Caña” lució con la que fuese su primera túnica procesional.

También había muchas ganas de salir en la Real Cofradía del Dulce Nombre de Jesús y María Santísima de los Dolores. Poco después de su salida en calle Carrera, Madre e Hijo se encontrarían a las puertas de la parroquia de San Juan Bautista.

La Virgen de los Dolores se encontró con el Dulce Nombre en San Juan

La Virgen ataviada con exquisito gusto y elegancia continuó hacia las calles más señeras del centro histórico sin poder llegar al recorrido oficial. Lo hizo bajo los sones de la Banda Municipal de Música “Maestro Paco Tenorio” de Arriate. En el cortejo la acompañaron tres penitentes ataviados con la indumentaria que llevarán los del Cristo. Esto es, túnica negra y galardones, capa y cíngulo morado.

El Martes Santo lo completó la Venerable Hermandad de Culto y Procesión y Cofradía de Nuestro Padre Jesús Coronado de Espinas y María Santísima de la Salud. Otra hermandad que llegó de un barrio y que fue la última en incorporarse a la Semana Santa veleña. Este año precisamente se cumplido del XXV Aniversario de la llegada de la talla a la ciudad. La Virgen de la Salud, encargada al imaginero sevillano Darío Fernández, esperan que pueda ser bendecida en 2023. Le acompañaron durante el recorrido la Banda de Cornetas y Tambores de la Expiración de Quesada (Jaén).