Unicaja

Nzosa trabajará este verano en Los Ángeles

  • El canterano mejora de sus dolencias en el pubis y tiene previsto viajar en julio para trabajar en Estados Unidos tutelado por su agencia, CAA

Nzosa pelea por un rebote durante un partido de esta temporada.

Nzosa pelea por un rebote durante un partido de esta temporada. / ACB Photo / M. Pozo

La temporada para Yannick Nzosa acabó el 31 de marzo, día de la derrota del Unicaja ante el San Pablo Burgos. Fue su último partido, no jugó en las postreras nueve jornadas. Igual con él sano, el Unicaja aún estaba en competición. Había aguantado con unos dolores en la zona del pubis y abductores, a veces callándose para poder seguir ayudando al equipo. Pero ya eran demasiado intensos y se decidió que lo más inteligente era parar. Nzosa llegó en el verano de 2019, pero por los problemas burocráticos apenas jugó un puñado de partidos con el equipo junior. Ha sido ésta su primera temporada completa en Málaga y ha rebasado todas las expectativas. Ha jugado 40 partidos, con 4.4 puntos, 2.6 rebotes y 0.8 tapones para 5.0 de valoración en 11 minutos en pista. Con actuaciones deslumbrantes y decisivas en partidos concretos, con unos destellos de jugador de una categoría superior.

Nzosa permanece en Málaga recuperándose de su problema. Va haciendo cada vez más cosas y se trata cada día en el Carpena mientras va remitiendo el dolor. Es una zona traicionera y se va con tiento. Dentro de unas semanas, el pívot congoleño irá a su casa, en Kinshasa, a ver a su familia después de un año. Sus mentores, con Joe Lolonga, estuvieron en Málaga varias veces, la última en el partido ante el Real Madrid que despidió la temporada. El acuerdo está para la revisión de su contrato (hasta 2024, con más sueldo y cláusula más alta), que incluirá una cláusula de salida de 1.5 millones de euros para un equipo de Euroliga y de unos 700.000 euros para la NBA, el máximo que puede pagar una franquicia sin que cuente para su límite salarial. Se firmará cuando cumpla los 18 años. De partida, la idea es que Nzosa esté dos años más en Málaga y dé el salto en 2023. Pero si su evolución sigue la tendencia de esta temporada y las proyecciones en el draft son favorables, será inevitable que se marche en 2022.

La nacionalización como español está en la fase final, se espera que entre en breve en el Consejo de Ministros. La FEB está muy interesada porque la FIBA prepara una nueva norma que puede dilatar en tres años el debut de un jugador naturalizado por un país en las categorías inferiores. Hay un Mundial sub 19 a la vista (del 3 al 11 de julio) al que podría ir, pero ahora mismo está muy complicado que los trámites se completen, más allá de su estado físico.

Nzosa firmó hace unos meses con la agencia Creative Artists Agency (CAA), una de las más poderosas en el baloncesto americano, dirigida por la familia Tellem. Los Gasol, Chris Paul, Joel Embiid, Zion Williamson o Paul George son algunos de sus clientes. Y el plan que tiene, el Unicaja ya ha sido informado de ello, es que Nzosa viaje directamente desde Kinshasa hasta Los Angeles para trabajar allí durante el mes de julio unas semanas, en las instalaciones que tiene la agencia, con otros jugadores jóvenes. Coincidirá con algunos de los que trabajen para el draft (se celebrará el 29 de julio) y podrá familiarizarse con lo que, a no mucho tardar y si nada se tuerce, será su hábitat. Regresaría a principios de agosto, para la segunda semana de ese mes está previsto que el Unicaja arranque la pretemporada de la temporada 2021/22, para la que Nzosa tendrá un rol importante.

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