El patrón de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, aplazará el futuro del Gran Premio de Bahréin, que fue aplazado por las revueltas políticas que se están sucediendo en el país asiático.

"Necesitamos esperar un poco más para ver exactamente qué progresos se han hecho", señaló el inglés, que apuntó que ya habría podido decir "adiós a Bahréin", pero que una decisión definitiva no era inminente: "Creo que se podría estar seguro a principios de junio", advirtió.

La Federación Internacional del Automóvil (FIA) había dado de plazo hasta este 1 de mayo para que el país comunicase si podría reprogramar la carrera, que inicialmente se debería haber disputado el 13 de marzo y que tendría que haber sido la primera del campeonato. "Las cosas pueden cambiar en un par de semanas, así que no se sabe. De repente todo podría ser pacífico en un mes y ellos serían felices de celebrar el gran premio y nosotros de estar allí", aseveró Ecclestone, que añadió que está discutiendo la situación con el presidente de la FIA, Jean Todt.

Además, Ecclestone desea que Turquía siga acogiendo una cita del gran circo, después de que la Cámara de Comercio turca haya mostrado su desacuerdo sobre los pagos. "Turquía es uno de nuestros mejores circuitos, aunque no atrae a una gran masa de espectadores. Estaría decepcionado si la perdermos, pero no podemos mantenerla si se hunde", aseguró. En 2009, sólo se vendieron 36.000 entradas para los tres días.