En cada comparecencia Joan Plaza intenta ser como una gota malaya para que sus conceptos calen externamente. Es optimista con la evolución del equipo al tiempo que ambicioso porque otea lejos el tope del equipo. "No sé si estaremos al 60% o al 70%, pero no estoy preocupado porque veo recorrido, no hemos hecho ningún partido redondo, siempre tuvimos fallos", afirmaba el técnico, al tiempo que alertaba de las capacidades del Alba Berlín.

"No tiene mucho sentido ganar en la carretera si no ganamos en casa, es una lectura que debemos hacer. No es fácil ganar en Cedevita, es una competición muy corta en la primera fase y tenemos que ser sólidos en casa", dijo antes ponderar las cualidades del contrincante del viernes: "Es campeón de la Supercopa alemana, van líderes 5-0 en la Bundesliga y ganaron a los San Antonio Spurs. Si eso no hace que respetemos al rival soberanamente, el último de la prensa o el último del palco, nos equivocamos. Es muy duro defensivamente, agresivo en la línea de pase. Son muy atléticos y muy verticales, capaces de jugar con cinco en el perímetro, con muchas situaciones de 1x5 salvajes pero lo hacen por talento".

Plaza insistió en que "tengo la tranquilidad de saber que estamos muy lejos de nuestra capacidad real. No ha habido ningún partido redondo, estamos lejos aún del tope. No sé si a un 60% o 70%, pero estamos muy lejos. Tenemos muchos dientes de sierra durante los partidos y eso nos ha evitado ganar con más holgura para coger margen con el average para ACB o Top 16. La euforia externa no la puedo controlar, es bueno que la gente esté contenta. Nadie ha abierto cava, no estamos felices totalmente de lo que hemos hecho. Es bonito batir records. Lo ideal es que fueran 10 victorias de arranque. Me gustaría dejar el nivel de exigencia más arriba.Si ganamos 8 o 9 sería meritorio, 4 no me estimula. Trabajaremos para alargar al máximo esa condición", al tiempo que pidió tiempo para alcanzar regularidad:"Uno de los retos de los entrenadores es ser constantes. Hemos de tener claro que con estos dientes de sierra podemos ganar a una serie de equipos, pero para vencer a los grandes hay que estar 40 minutos y que los momentos bajos sean muy cortos. Soy relativamente optimista y confío en que el propio Fran, que está jugando extraordinario, pueda hacerlo mejor. Estoy esperanzado en que el margen de mejora sea muy amplio. No percibo una sobriedad que me preocupe porque se llegue al tope. Hemos de estar bien en febrero o al final del Top 16, pero antes hay que ser capaces de confirmar que estaremos ahí. Igual después habrá un bajón para después terminar la temporada a máxima nivel".

El técnico barcelonés valoró los cambios en la dirección deportiva: "Son decisiones de arriba. A Carlos hay que ayudarle, está en proceso de aprendizaje para que acabe de mejorar y coger las condiciones adecuadas. Manolo tiene contactos en todo el mundo y ese trabajo de jefe de operaciones puede ser bueno para el club".

Por último, fue cuestionado por Caleb Green: "Evoluciona lentamente. Antes de ficharlo hablé con todo el mundo, me faltó hablar con el policía de su pueblo. Todo el mundo me decía que tiene talento, pero muchas cosas son nuevas para él y tiene que asimilarlas con su juego", remató.