La botella medio llena o medio vacía. Dañada como el resto por la crisis, la economía andaluza crecerá en 2009 sólo un 0,6%, el menor ritmo expansivo de los últimos 15 años. El dato, uno de los más destacados del informe Previsiones Económicas de Andalucía. Otoño 2008, elaborado por Analistas Económicos (el servicio de estudios de Unicaja), tiene al menos una lectura positiva: la comunidad, pese a sufrir un notable retroceso, escaparía según el estudio -uno de los más fiables de cuantos se elaboran en la región- a la tan temida recesión. La desaceleración también afectará al crecimiento del presente ejercicio, que con un 1,3% en 2008 quedará 2,3 puntos por debajo del de 2007.

Por provincias, Córdoba registra el mayor crecimiento (2,2%) durante el segundo trimestre, por delante de Sevilla y Jaén, mientras que en el extremo opuesto se encuentra Almería, que creció por debajo del 1%. Para el conjunto del año, la previsión es que Málaga siga liderando el crecimiento regional, con un 1,9%, dos décimas por delante de Sevilla (1,7%), y de Córdoba (1,6%) y Jaén (1,5%). Esas cuatro provincias superarían el promedio regional (1,3%), mientras que bajo ese nivel se situarían Huelva (1,1%), Granada (1%), Cádiz (0,8%) y Almería (0,6%).

El estudio constata también el deterioro del mercado de trabajo, "a consecuencia principalmente de la crisis en el sector de la construcción y de la reducción de la ocupación masculina". Eso puede traducirse en que la ocupación caiga en torno a un 0,5% (15.000 personas), reduciendo el número trabajadores hasta los 3,2 millones.

Otro dato significativo: desde enero de 2005 hasta marzo de 2008 se terminaron en Andalucía 406.263 viviendas, pero sólo 226.141 se escrituraron como vendidas, lo que arroja un stock acumulado de 180.000 inmuebles sin ocupar (por encima del 44% de la producción del periodo).

Y en el caso del turismo, la ocupación hotelera muestra, según el informe, una tendencia estable, por encima de los 16 millones de viajeros que elegirían Andalucía como destino. La demanda nacional sustentará buena parte de ese empuje, porque la crisis podría reducir hasta en un 1,4% la llegada de visitantes extranjeros.