El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, aseguró ayer que la recaudación ha crecido un 5,4% en los ocho primeros meses del año, lo que demuestra, según él, que hay más actividad en España.

Así lo señaló el ministro en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, donde afirmó que las pymes y los trabajadores por cuenta propia también están generando más recaudación.

Así, las retenciones del trabajo de las pequeñas y medianas empresas crecen un 6,3%, mientras que la recaudación por IVA de este tipo de entidades sube un 6,4%. "Estamos viviendo una nueva etapa en la que la recaudación viene también de la pequeña y mediana empresa y de los autónomos", afirmó.

El ministro de Hacienda recordó que los autónomos con ingresos menores de 15.000 euros, unas 325.000 personas, serán las primeras en beneficiarse de la reforma fiscal que aún está en tramitación parlamentaria, con una rebaja de seis puntos en sus retenciones. "Se acuerdan de los autónomos ahora", espetó Montoro a la diputada socialista María Pilar Lucio, a quien recordó que las organizaciones sectoriales han celebrado la reforma fiscal aprobada por el Gobierno.

También aseguró que el Ejecutivo sigue trabajando con esas asociaciones para dar cumplimiento a sus demandas y establecer nuevos incentivos para los emprendedores, como la tarifa plana para nuevos autónomos.

Por su parte, Lucio dudó de la efectividad de la bajada de retenciones a los autónomos y afirmó que la política del Gobierno ha consistido en subir el IRPF a los trabajadores por cuenta propia, a las pequeñas y medianas empresas y bajar los impuestos a las grandes sociedades. "Nadie está contento con su reforma fiscal", señaló la diputada

En otra pregunta sobre la reforma fiscal, Montoro rechazó las críticas del diputado socialista Pedro Saura sobre la destrucción del Estado de Bienestar en España. A su juicio, no se ha reducido respecto al año 2011 y copa el 28% del PIB español. "Esa afirmación no tiene ningún rigor cuantitativo estadístico", afirmó. Montoro recordó que cuando subió el IRPF en 2011 lo hizo a rentas más altas y que ahora lo está bajando a todos los ciudadanos. Y añadió que las rentas más altas quedarán en 2016 igual tratadas que con el Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, y las más bajas cinco puntos por debajo.

"Esto permitirá que prácticamente 1,5 millones de contribuyentes queden exentos de impuestos; eso es hacer progresividad fiscal", señaló Montoro, que pidió a Saura "rigor" al manejar las cifras y estadísticas para poder hablar "con toda seriedad" de la reforma fiscal.

El diputado Pedro Saura cifró, por su lado, en 15.000 millones la reducción del Estado de bienestar en los tres años de Gobierno. Y, según sus cálculos, la bajada de impuestos, que supone unos 9.000 millones de euros, irá en un 60% de su importe al 10% más rico de la población española.

Según Saura, el 30% de los ciudadanos más pobres se lleva "cero" de esa rebaja porque no paga impuestos, y al mismo tiempo son los más perjudicados por la reducción del Estado de bienestar. A su juicio, la política de Montoro incrementa cada vez más la brecha fiscal entre ricos y pobres y envía el mensaje de que defraudar hoy sale gratis en el futuro.

En otra pregunta, esta en concreto sobre el IRPF, Montoro negó que las familias con tres y más hijos tengan que pagar más impuestos tras la entrada en vigor de la reforma. "No es verdad", se limitó a decir.

Montoro calificó de "absurdas" las cifras del PSOE y anticipó que el Gobierno va a aumentar los mínimos familiares y va a crear impuestos negativos sobre la renta. Así, pidió al principal partido de la oposición que no falsee el debate y que haga una consideración "seria" y reflexione sin usar cifras falsas.

Por su parte, la diputada socialista Rosa Aguilar criticó Montoro por usar "verdades a medias" para que las familias no conozcan el impacto real de la reforma. "Han maquillado la reforma para que parezca lo que no es", aseguró.