Cuarenta subsaharianos consiguieron acceder ayer a Melilla tras un nuevo salto masivo a la valla perimetral que separa la ciudad autónoma de Marruecos, en el que participaron más de 600 personas en distintos grupos.

Treinta y cinco de los que lograron acceder a territorio español llegaron por su propio pie hasta el Centro Temporal de Inmigrantes (CETI), donde fueron recibidos por algunos de sus compatriotas con el ya tradicional grito de "bosa, bosa". Los otros cinco fueron trasladados al Hospital Comarcal. Otros 17 inmigrantes permanecieron siete horas encaramados en lo alto de la valla y tras descender se hizo cargo de ellos Marruecos al considerarse que no habían entrado en suelo español, según informaron a Europa Press fuentes oficiales.

Es la entrada más numerosa en lo que va de 2015, la tercera de este año, en el que la presión migratoria continúa siendo "intensa", con avistamientos y acercamientos que se suceden casi a diario, según fuentes policiales.

Asimismo, cientos de inmigrantes han sido detenidos en varias redadas llevadas a cabo por la policía marroquí en las últimas 24 horas en las cercanías de Ceuta y Melilla. Según fuentes de la ONG Gadem, especializada en ayuda a los inmigrantes, los arrestos se produjeron desde el mismo momento en que el lunes se anunció que se desmantelarían en breve los campamentos en torno a Ceuta y Melilla.