Málaga necesita duplicar sus puestos de atraque en puertos deportivos
Actualmente hay poco más de 4.200 amarres · El sector demanda la creación de 3.000 más "como mínimo" · Si todos los proyectos de nuevas instalaciones se llevan a cabo, la demanda estaría cubierta


Encontrar hueco para amarrar una embarcación deportiva en Málaga es algo casi imposible. O al alcance de muy pocos, ya que los precios para adquirir uno si no se quiere pasar por las listas de espera pueden alcanzar los 175.000 euros. Por ello, el sector pide la creación de nuevas instalaciones que aumenten la capacidad y las opciones para los amantes de las embarcaciones recreativas.
Málaga tiene actualmente unos 4.200 puestos de amarre en 11 puertos deportivos. Pero la demanda es tan alta que debería duplicar su capacidad para atenderla. Basten dos ejemplos. En el puerto de La Caleta de Vélez la lista de espera es de 1.183 puestos. Y en La Bajadilla, en Marbella, de 742. Son datos oficiales que maneja la Empresa Pública de Puertos de Andalucía (EPPA), dependiente de la Junta de Andalucía. Pero hay que sumar, entre otros, el millar de personas que han demandado uno al Real Club Mediterráneo para el futuro puerto deportivo de la dársena de Levante en el Puerto de Málaga.
"Como mínimo, harían falta 3.000 puestos de atraque en la provincia", afirma el presidente del Real Club Mediterráneo, Rafael Vidal. "Pero eso sólo serviría para cubrir la demanda inicial, luego habría que seguir ampliando", añade Vidal. En la Asociación de Puertos Deportivos de Andalucía aseguraron que la cifra debería elevarse "hasta los 5.000 o 6.000" puestos.
El sector conoce la demanda y pide que se acelere la construcción de nuevas instalaciones. "Hace tiempo que entraron en un parón y es necesario que todos los proyectos empiecen a hacerse realidad", asegura el máximo responsable del Club Mediterráneo. Y si todos los puertos deportivos que hay ya en proyecto se realizaran, Málaga contaría pronto con otros 4.000 puestos de atraque, lo que serviría para atender la actual demanda.
Pero no es fácil. Benalmádena, es uno de los ejemplos. Allí el anterior alcalde, Enrique Bolín, tenía como proyecto emblemático la ampliación del puerto deportivo, pero el actual regidor, Javier Carnero, aseguró hace unos días que la decisión no es sólo suya, sino que depende de los vecinos y también de lo que piense la EPPA, por lo que está estancado. La entidad autonómica, por su parte, anunció que ampliará el puerto La Bajadilla, en Marbella, con 400 puestos más, aunque la idea es que en el futuro pueda contar con casi 2.000 más. Pero por ahora el proyecto sólo ha superado el trámite medioambiental. También se prevé la ampliación de las instalaciones de Fuengirola. El propio PGOU recoge la actuación para 725 nuevos amarres, aunque todavía no ha dado sus primeros pasos para ser una realidad.
El que sí los ha dado es el de Estepona. La Junta ya ha licitado el estudio de impacto ambiental y la redacción del proyecto de ampliación del puerto deportivo, lo que le permitirá llegar hasta los 600 barcos. Igual ocurre con el de Caleta de Vélez, que podrá pasar de 300 a un millar de atraques para embarcaciones recreativas en una actuación que costará 66 millones de euros, según recoge el proyecto .
Las otras dos actuaciones se encuentran en la capital. Por un lado, en la dársena de Levante del Puerto de Málaga, donde se prevé la construcción de un pequeño puerto deportivo de 140 amarres. Mientras, el otro iría en El Morlaco y tendría 544 puestos para embarcaciones de entre ocho y 20 metros de eslora, aunque éste aún se encuentra en estudios iniciales.
Otros municipios de la provincia como Nerja, Torrox o Rincón de la Victoria recogen en sus planes urbanísticos la construcción de puertos deportivos, pero aún no hay propuestas concretas.
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