Volver a reactivar cuanto antes el curso que, de forma incompleta y sin contenidos prácticos, empezó en septiembre y se paralizó tras las vacaciones navideñas. Ese es el objetivo del Servicio Andaluz de Empleo para el último de los antiguos consorcio asumidos, la Escuela de Hostelería de Benalmádena La Fonda. Aunque aún no se atreven a dar fechas concretas, responsables de la Junta de Andalucía trasladaron ayer a los docentes que la intención es retomar las clases "lo antes posible" y prevén hacerlo tras la Semana Santa.

El delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo; la delegada territorial de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, Francisca Montiel; el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas; y la secretaria provincial del SAE, Carmen López, mantuvieron ayer una primera reunión de trabajo con la plantilla del centro tras la reciente integración de los empleados en el SAE. En dicha reunión, se consultó con el equipo docente todos los elementos necesarios para poner en activo el centro que forma al año a más de medio centenar de profesionales en cocina y sala. "Quieren continuar el curso lo antes posible, hemos estado cuadrando calendarios y reajustando horas lectivas", explicó el profesorado.

Según afirmaron desde la delegación provincial del Gobierno andaluz, "en esta primera reunión de trabajo se ha abordado la planificación de la escuela de hostelería para proceder al reinicio de las clases después de que el pasado 8 de marzo el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía publicara el acuerdo de cesión de activos y pasivos de La Fonda, que pasa a formar parte del SAE".

La Fonda, que comparte tres docentes con La Cónsula además del jefe de estudios y un sistema similar, con un restaurante también abierto al público, pasó en blanco todo el curso pasado. Aunque se convocaron los cursos, se recibieron solicitudes y los alumnos se prepararon para empezar en septiembre, no pudieron ingresar en el centro porque no se dio luz verde a la continuación de la docencia. Muchos se quedaron a la espera durante meses. Al ver que no había solución, otro tanto decidió buscarse otra formación o una nueva salida profesional. Los profesores llegaron a acumular diez nóminas sin cobrar y no recibieron los atrasos hasta pocos días antes de las elecciones autonómicas. En verano de 2015 volvieron a convocar los cursos y se repitió el proceso. En este caso, en septiembre sí que iniciaron las clases, pero exclusivamente teóricas. Los trabajadores volvieron a quedarse sin cobrar y los meses se fueron sumando hasta volver a los diez que les deben aún hoy.

Después de casi dos años de restaurante cerrado, de clases perdidas, de encierros y, sobre todo, mucha lucha en la calle, parece que finalmente la solución ha llegado, aunque todavía no saben cuándo ni cómo cobrarán lo adeudado. Eso sí, a pesar de ir de la mano de La Cónsula han tenido que esperar un mes más para verse dentro del SAE.

"Se buscan alternativas" para la plantilla del CIO

El consejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Empresa y Comercio, José Sánchez Maldonado, explicó ayer en la comisión parlamentaria del ramo en cuanto al caso del CIO Mijas que se están realizando "gestiones" desde los servicios jurídicos de la Junta con el objetivo de "dar salida a sus seis trabajadores". Para ellos, según insistió Sánchez Maldonado, se están buscando "alternativas para que sigan el camino de los 161 trabajadores" de los diez consorcios que ya están integrados en el Servicio Andaluz de Empleo y se articule una solución "aunque sea transitoria mientras se realiza la cesión de activos y pasivos de este consorcio".