Cómo adquirir el mejor plato de ducha y mampara para el baño

A la hora de decorar el baño de una vivienda, existen muchos factores importantes que hay que tener en cuenta. Uno de los principales es, sin duda, saber elegir correctamente el plato de ducha y la mampara que mejor se adapte a nuestros gustos y necesidades. A continuación vamos a ofrecer algunos consejos para que el diseño y conformación de su baño sea cómodo, práctico y funcional.

Decorar una casa puede ser una tarea realmente complicada en la que deben de tomarse muchas decisiones basadas, tanto en la estética, como en la funcionalidad de todos los espacios. El caso del diseño del baño de una vivienda puede resultar especialmente difícil, debido a que este equilibrio entre decoración y facilidad de uso es todavía más delgado.

Un detalle al que debemos de prestar una gran cantidad de atención es a la elección del plato de ducha y la mampara, dos elementos básicos que marcarán el resultado final para esta importante habitación, ya que son puntos focales tanto en practicidad como en estética.

Existen muchos tipos de platos de ducha y de mamparas disponibles en el mercado, por lo que hay que saber elegir bien cuál de ellos se adaptan mejor a nuestros gustos personales y a nuestras necesidades de funcionalidad y espacio.

Cómo adquirir el mejor plato de ducha

En primer lugar, vamos a fijarnos detenidamente en la elección de los platos de ducha y en las distintas posibilidades que tenemos a nuestra disposición. Una buena forma de empezar a descartar opciones puede ser a través del grosor del plato o del enmarcado que queremos (semi enmarcado, enmarcado o sin enmarcar).

A continuación podemos elegir el tamaño, el material - cuarzo, granito, mármol, piedra, acrílico, etc. - o el color - negro, blanco, beige, madera, etc. -. Si queremos un diseño moderno o clásico también es una elección que tenemos que plantearnos, así como la textura - arena, colmena, granito, lisa, etcétera -.

Muy importante también es el rango de largo y el de ancho, la fabricación - estándar o a medida -, el nivel de antideslizamiento y la forma - cuadrada, rectangular o circular -. Otros aspectos más relacionados con el presupuesto tienen que ver con la gama de productos entre la que queremos elegir - económica, alta o media -, el precio final del producto y, por supuesto, el plazo de entrega previsto para su instalación. Como se puede comprobar, son muchos los factores que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un plato de ducha perfecto para cada tipo de baño.

Qué hay que tener en cuenta para comprar una mampara

Otro de los elementos indispensables en un cuarto de baño son las mamparas de ducha, ya que si en ellas un plato de ducha estaría a medias. A la hora de elegir qué tipo de mampara es la que mejor se adapta a nuestros gustos, es necesario evaluar algunas características básicas. En primer lugar, el grosor que queremos en el vidrio o el tipo de perfil - con o sin perfil inferior o con perfil inferior bajo -.

También es importante elegir el tipo de estanqueidad - alta, media o básica -, así como el tipo de vidrio - transparente, serigrafiado, mateado - o el material y el color de la periferia - acero inox, aluminio bronce, aluminio plata, etcétera -.

También habrá que prestar atención si el diseño que queremos permite variación en las medidas, la gama de precios, la marca, el precio final del producto e igualmente, el plazo de entrega acordado para su instalación.

La elección de una mampara o de un plato de ducha puede ser mucho más compleja de lo que podría pensarse en un primer momento. Lo esencial en todo el proceso es tomar en cuenta el diseño en conjunto, colores y estilos determinarán en gran medida, las decisiones de compra, así como el espacio disponible y la distribución de todos los elementos que conforman la habitación.

Se recomienda no tomar decisiones a la ligera, ya que una reforma de un baño debe durar bastante tiempo y lo que se quiere es contar con un espacio que sirva no solo para el aseo diario, sino para la relajación, el descanso o, recargar energías para el inicio de una jornada.