Las playas de Málaga presentan desde hace un par de semanas una alta concentración de medusas que obligan a los bañistas a estar alerta, sobre todo para evitar las picaduras durante el baño. Los expertos recomiendan que lo más eficaz es no acercarse a ellas, apenas tocarlas ni mucho menos sacarlas del agua.

De nuevo estos invertebrados se dejaron sentir en las costas malagueñas en la jornada de este sábado. Los bañistas vieron cómo de nuevo se izaba la bandera blanca que previene ante la visita de medusas en muchas de las playas. El litoral de la capital fue una de las zonas que se vio afectada por su presencia.

La aplicación Infomedusas, que gestiona el Aula del Mar en colaboración con la Diputación de Málaga, advierte, desde la mañana de este sábado, de un nivel medio de medusas en Arroyo de Totalán, Baños del Carmen, El Candado, El Chanquete, El Palo, en la Fábrica de Cemento, La Araña, La Caleta, La Malagueta, Pedregalejo y Peñón del Cuervo.

Las costas más afectadas fueron las de la localidad de Manilva. Por la tarde se llegó a alertar de un nivel muy alto de medusas en La Colonia y Sabinillas, mientras que Chullera, El Negro, Granados-Castillo, Las Arenas, Los Toros, Punta Chullera y Tubalitos se mantuvieron en un nivel amarillo, es decir, medio. La Duquesa era la única playa de la zona que presentaba un nivel bajo de estos invertebrados.

La mayoría de las playas de Benalmádena no tuvieron avisos, sin embargo, en Bil Bil, Malapesquera y Sunset Beach sí se activó la alerta amarilla a las 16:00 de la tarde. La Paloma, Piedra Paloma y Playa Ancha, es decir, todas las playas de Casares, presentaron avisos medios. Marbella, La Cala de Mijas, Benalmádena y Estepona, junto a la capital, fueron los puntos de la provincia en los que más aparecieron las temidas medusas.

Por su parte, Algarrobo, Fuengirola, Nerja, Rincón de la Victoria, Torremolinos, Torrox, y Vélez Málaga (a excepción de Torre del Mar), fueron las localidades que no presentaron avisos durante la jornada.

La mayoría de las que se ven estos días son las pequeñas Pelagia noctiluca, pero este verano los bañistas se han visto sorprendidos por cientos de ejemplares de gran tamaño, pertenecientes a la especie Rhizostoma Luteum. Pueden asustar más, pero los expertos aseguran que su picadura no es tan dolorosa.