Primer dato positivo en nueve meses. El paro bajó en la provincia de Málaga durante el mes de marzo. La disminución es pequeña, sólo un 0,4%, pero al menos sirve para cambiar la racha de nueve meses consecutivos de aumento del desempleo malagueño. El número de parados se sitúa ahora en 100.335 personas, 445 menos que en febrero.

La variación mensual es positiva pero la que compara con la del mes de marzo de 2007, la interanual, no tanto. En un año el paro se ha incrementado en casi 14.000 personas, un 16,12%.

La situación de los desempleados mejoró principalmente en el sector servicios con 1.400 parados menos, aunque el paro también disminuyó ligeramente en la agricultura. Por el contrario, la industria aumentó (aunque sólo en 14 personas) y fue la construcción la que sigue dando causas para afirmar que está en crisis. Un total de 744 personas que trabajan en dicho sector perdieron su empleo durante el mes de marzo. En el último año lo han perdido más de 6.000 personas. "Esto demuestra que algo se está haciendo mal y que hay que empezar a cambiar las cosas para que otros sectores, principalmente los relacionados con la investigación y la innovación acaparen más empleo y de más calidad", afirmó ayer Antonio Herrera, secretario provincial de Comisiones Obreras. Su homólogo en UGT, Manuel Ferrer, también subrayó la necesidad de buscar "nuevas fórmulas" para que la economía malagueña no se base sólo "en la construcción y los servicios".

Ambos sindicatos criticaron también el estancamiento en el 9% de los contratos indefinidos, frente al 91% temporales. "Hemos ofrecido un pacto a las administraciones y a los agentes sociales para conseguir una mayor diversificación y una mayor estabilidad en el empleo y eso hay que luchar por conseguirlo", apuntó Herrera.

Eso sí, durante el mes de marzo el paro femenino y el de los jóvenes es el que mejor parado ha salido, ya que los nuevos contratos se han realizado principalmente a mujeres y menores de 25 años, según los datos ofrecidos ayer por el Servicio Andaluz de Empleo.