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Benalmádena pide apoyo a la Junta por posible cierre de Tívoli

  • El parque está en concurso de acreedores y arrastra una deuda de 11, 2 millones

Reunión mantenida en la sede del Gobierno andaluz en Málaga.

Reunión mantenida en la sede del Gobierno andaluz en Málaga. / M. H. (Málaga)

El Ayuntamiento de Benalmádena ha solicitado a la Junta de Andalucía apoyo ante un posible cierre del parque de atracciones Tívoli World, que actualmente se encuentra en concurso de acreedores necesario y arrastra una deuda 11,2 millones de euros, según ha anunciado este jueves el alcalde, Víctor Navas.

El regidor ha mantenido hoy un encuentro con las delegadas del Gobierno andaluz y de Empleo, Patricia Navarro y Carmen Sánchez respectivamente para abordar la situación del parque, donde también han estado presentes los trabajadores del Tívoli afectados actualmente por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), y el concejal de Servicios Operativos, Salvador Rodríguez.

Navas ha reafirmado el apoyo del equipo de gobierno “a la continuidad de Tívoli, tanto por su importancia como reclamo turístico y motor generador de riqueza y empleo, como su carácter icónico para Benalmádena y la Costa del Sol”. Además, el primer edil ha recordado que los informes del administrador concursal “han vuelto a demostrar la viabilidad económica del parque”.

El alcalde ha informado durante el encuentro que ha trasladado a la gerencia del Grupo Inmobiliario Tremón, actual propietario de Tívoli, “la importancia y urgencia de que emita un mensaje de tranquilidad a trabajadores y ciudadanía, en el que asegure la continuidad de la actividad del parque este verano”.

Por su parte, la delegada del Gobierno andaluz confía en que el histórico parque de atracciones y espectáculos Tívoli World abra sus puertas este verano, así como ha manifestado su respaldo, tanto al mantenimiento del empleo como al funcionamiento de este parque temático con medio siglo de historia en la Costa del Sol.

La apertura del Tívoli es una pieza clave en la recuperación económica de la localidad costasoleña y de la propia provincia, ligada como está al sector servicios y turístico de la Málaga, siendo “uno de los que más ha sufrido en el último año”, ha recordado.

La situación actual, marcada por un descenso de los contagios, un incremento y agilidad en la administración de las vacunas y el próximo fin del estado de alarma hacen prever un verano “con mayores cotas de normalidad en términos económicos y turísticos, y en esa normalidad entra también este equipamiento”, ha valorado Navarro.

Para la Junta de Andalucía, esta infraestructura es un “reclamo” para los visitantes, forma parte de la oferta turística de la provincia y contribuye a paliar la crisis generada por la pandemia.

Desde el pasado mes de agosto, la empresa que explota el recinto desde su compra en 2004, la Compañía Internacional de Parques y Atracciones SA (CIPASA), vinculada al empresario cordobés Rafael Gómez, más conocido como Sandokán, se encuentra en concurso de acreedores necesario y arrastra una deuda de 11,2 millones de euros. A ello se suma el litigio judicial con Tremón, al que vendió el espacio en 2007.

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