El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Vélez-Málaga, integrado por el PP y el PA, consiguió sacar adelante los Presupuestos de 2008 gracias al apoyo que le prestaron los dos concejales de Izquierda Unida. La expectación fue máxima en el Salón de Plenos, tras la duda que se había sembrado en la comisión de Hacienda cuando los representantes de la coalición de izquierdas se abstuvieron en la votación. El Partido Popular gobierna con una minoría de diez concejales a la que se suma como único socio el representante andalucista. La mayoría de 13, necesaria para aprobar el presente ejercicio económico sólo fue posible con el respaldo de IU.

Para ello, el alcalde de Vélez-Málaga, Francisco Delgado Bonilla (PP) tuvo que aceptar 70 de las 73 propuestas que el portavoz de Izquierda Unida presentó para incorporar a los Presupuestos. Sólo se quedaron fuera la creación de una empresa mixta para la gestión del servicio de transportes urbanos en la que se incluía la reducción del precio del billete del tranvía; la ampliación de la representación en el Consejo de Administración de la Empresa Municipal de Vivienda, Infraestructura y Promoción (Emvipsa) y la reducción de los puestos laborales. La ampliación de la oferta pública a personas discapacitadas se quedó en cinco plazas de las diez que proponía la coalición.

Por su parte el PSOE propuso que los Presupuestos se quedaran sobre la mesa, ya que según explicó el concejal Fermín Domínguez, éstos eran "inestables", basados la mayoría de ellos en recursos de otras administraciones; "con recortes en áreas como Cultura o Educación con una importante incidencia en la sociedad". También echó en falta un plan financiero como base del Presupuesto. La enmienda fue apoyada por el Gripmtm que también los consideró "insostenibles".

La falta de apoyo del resto de los grupos de la oposición fue criticada por Delgado Bonilla quien recriminó al portavoz socialista, Antonio Souvirón, que "debería haber buscado la posibilidad de un acuerdo en vez de trabajar por una moción de censura". Durante la semana, el portavoz de IU, Marín, no descartó esta opción, siempre y cuando "hubiese un giro en la política" llevada a cabo durante el mandato anterior.