El Unicaja no se dejó llevar. Aplastó al Betis Energía Plus y se carga de moral. Podía ser un partido trampa y decía Plaza en rueda de prensa que, al menos, "sí complicado". Los deberes, desde luego, se quedaron bien hechos pese a la euforia de ganar al campeón de Europa. "Nunca es fácil jugar tras ganar al Fenerbahce", añadía el técnico catalán.

"Después del partido del jueves, con poco margen, para sacar el máximo rendimiento has de bajar la adrenalina pero hemos salido muy tensos, muy serios, creciendo desde una buena defensa. Al principio hemos tenido demasiadas pérdidas de balón por no saber leer el partido. Es muy fácil que te relajes pero al final hemos ganado los cuatro cuartos. Es un síntoma de madurez que después de la victoria del jueves hayamos jugado al máximo nivel", definió Joan Plaza al término del encuentro, "satisfecho a pesar de los errores que hayamos cometido".

Insistía el preparador cajista en que "no tenía miedo, pero vosotros lleváis batallas en esto y sabéis que después de un regalo como el del otro día no es que exista una falta de respeto, pero he tenido que esforzarme mucho con los jugadores para que viesen lo que suponía una derrota, contra un equipo con jugadores Euroliga". Por lo que explica que en la preparación del choque "hemos hablado más de situaciones psicológicas que técnicas o tácticas. Hay equipos que salen sin respeto al rival. Pero hemos salido tensos y me alegra que el equipo ha mostrado madurez, pero deberá mostrarla todos los días. Las derrotas hay que minimizarlas pero las victorias hay que olvidarlas".

Ahora se presentan seis días hasta que el equipo regrese a la Euroliga. El Olympiacos dará el pistoletazo de salida al endemoniado ritmo de competición que tendrá que afrontar el Unicaja esta temporada. "Estoy administrando los tiempos, no sólo en los partidos, con menos tiempo y más calidad, pero el calendario es el que es. Veremos cómo hacemos este croquis pero estos cinco partidos vienen en un periodo muy corto y nos gustaría ganar", decía al respecto Plaza, que describe como mayor problema "el tema mental": "Para un jugador el cansancio es cansancio. El cansancio mental es que el hemos de sobreponernos. Si no tienen un día entero de descanso es como si no descansaran. Ha habido entreno voluntario y ha venido toda la plantilla. En cuanto la cosa se complique es cuando hay que demostrar que somos maduros y adultos como para jugar".