Josh Adams es una de las piedras angulares del nuevo proyecto del Unicaja. La elección del base es uno de los asuntos más complejos del verano y esta vez el elegido fue el estadounidense, que tiene la oportunidad de volver a Europa después de etapas en Rusia (Avtodor Saratov) y Turquía (Anadolu Efes y Besiktas). Afronta esta aventura con ilusión, pero también con ambición. Se pone metas altas el americano, que quiere probarse en la ACB. "Una vez que estaba en Estados Unidos vi las tres opciones que tenía y quería jugar en Málaga", decía el propio protagonista con firmeza. 

Hay convencimiento en Los Guindos con la apuesta por Adams. "Es un jugador al que habíamos seguido varios años, lo conozco perfectamente, a pesar de su edad tiene una experiencia en Europa. Salió de su universidad y tuvo una etapa maravillosa. Tiene un gran atleticismo, es un jugador muy completo. Muy buen base, tira muy bien de tres y a campo abierto es espectacular. Esperamos mucho de él", aseguraba el director deportivo malagueño Manolo Rubia, que daba detalles de la elección: "Había varias opciones y nos decidimos porque lo conocíamos, es muy rápido en transiciones y puede tirar de tres y generar tras el bote. Como puede hacer Jaime Fernández. Es perfecto para la rotación en esa posición".