La portavoz del PP en el Parlamento andaluz, Carmen Crespo, sostuvo ayer que el decreto ley aprobado por el Gobierno autonómico para que los funcionarios recuperen la jornada laboral de 35 horas semanales es una "medida improvisada" para "mejorar la imagen" de la presidenta de la Junta, Susana Díaz.

La política almeriense además recordó que no es una iniciativa "garantista", ya que atañe a una "competencia estatal" como "ya saben en Castilla-La Mancha, que ya lo hizo y tiene un recurso ganado por el Estado". Crespo explicó que esta medida podría haberse hecho "con lealtad y compromiso con los funcionarios, de la mano del Gobierno de la nación" y lamentó que Díaz "haya querido hacerlo de manera improvisada, confrontando con el Gobierno y con deslealtad institucional".

La portavoz parlamentaria del PP andaluz "aplaude" la reclamación de la jornada de 35 horas realizada por los sindicatos, postura que ve "lógica y coherente", aunque insta a estas organizaciones a "defender" en este caso a funcionarios que dejan fuera de esta medida, en referencia a los de educación y sanidad.

También afeó a la Administración autonómica que defienda la semana de 35 horas y no devuelva otros derechos a los empleados púiblicos. "Para reivindicar, hay que reivindicar desde Andalucía lo que tienen otras comunidades y el propio Estado, porque todavía no se les ha devuelto la paga extra del 2012 al completo a los funcionarios de esta comunidad autónoma y por tanto hay que empezar la casa no por el tejado sino por los cimientos", apostilló.