La Policía sostiene que Luis Miguel Pueyo, un célebre estafador condenado por el caso Arny y otros integrantes del grupo que el pasado junio secuestró al empresario sanluqueño Rafael Ávila, rescatado por los GEO días después en Almonte, son las mismas personas que unos meses antes, en abril, intentaron raptar en Seseña (Toledo) a un hijo del constructor Francisco Hernando, conocido como El Pocero. Los investigadores han concluido que el primer objetivo de los miembros de la banda era el hijo del Pocero, pero que ante la fuerte resistencia de éste, que logró evitar ser secuestrado, tuvieron que cambiar de planes y, poco después, raptaron a Rafael Ávila.

Pueyo, considerado el cabecilla de la banda, y otros siete detenidos por el secuestro de Ávila permanecen en prisión preventiva. Entre ellos está Raúl Brey Ábalo, propietario del chalé de Almonte en el que el empresario sanluqueño permaneció detenido ilegalmente durante 16 días. Brey es primo del presidente del PP, Mariano Rajoy.

En una nota de prensa, la Policía asegura que la banda de Pueyo pretendía pedir un rescate de 30 millones de euros por el hijo del Pocero y que para llevar a cabo el secuestro habían alquilado un chalé en la localidad madrileña de Perales del Río, en cuya bodega habían construido un zulo.

La investigación, realizada por el Grupo de Secuestros y Extorsiones de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) Central de la Policía Nacional, se inició tras la liberación de Rafael Ávila. Los agentes emprendieron una serie de averiguaciones para comprobar si los responsables de ese secuestro habían participado en otros, tal y como se desprendía de las pesquisas realizadas. Tras varias gestiones supieron que tres de los detenidos entonces (Pueyo, Miguel Rodríguez de Sousa y José María Hidalgo García), ahora en prisión, habían planificado también cometer el secuestro de Seseña.

La investigación policial ha permitido imputar los hechos sucedidos en la localidad toledana a cinco miembros de la banda. Los dos restantes (el constructor del zulo y la persona que les proporcionaba los vehículos para realizar los raptos) han sido detenidos en los últimos días.

La Policía ha explicado que los efectos intervenidos a los detenidos tras la liberación de Rafael Ávila confirmaron el intento de secuestro del hijo de El Pocero, ya que los miembros de la banda habían recabado abundante información sobre él. Incluso se les ha requisado algún vídeo difundido en internet en el que se observa a la familia del constructor en algunos actos públicos.

Además, en el teléfono de Miguel Rodríguez de Sousa, en el que fue hallada una fotografía de Rafael Ávila portando un periódico en la mano como prueba de vida, también fue localizado el número de teléfono del chalet de Perales del Río en el que iba a ser retenido el hijo del constructor.

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