Partido tosco y gris el presenciado ayer en El Maulí, donde Antequera y Portuense se repartieron los puntos en un choque que murió con 1-1 debido a la falta de gol de los verdiblancos y al buen hacer gaditano. El encuentro comenzó con el Portuense muy centrado en el juego. Ya en el minuto tres Jonhy falló con la portería prácticamente vacía después de un mal despeje al centro de Diego. El susto despertó a los antequeranos que, como viene siendo habitual, comenzaron fríos y no conseguían hacerse con el dominio del balón.

La primera ocasión local la tuvo Ruiz, que malogró una gran jugada de Popo. El partido entró en una fase de igualdad absoluta, aunque el coraje le daba a los verdiblancos una mayor presencia en el área rival. El Portuense, bien plantado atrás, intentaba salir a la contra. Sanlúcar, el mejor de los gaditanos, se movía con acierto entre líneas y su juego provocó la falta del 0-1, anotado por el ariete rojillo de libre directo. El Antequera no terminaba de reaccionar, aunque poco a poco iba descosiendo la tela visitante. Pepelu metió el miedo a Taranilla a la media hora y, cuatro minutos después, Iturralde despejó hacia su portería un disparo de Ruiz. Fue el empate.

La segunda mitad comenzó con el Antequera más metido en el encuentro, aunque los delanteros locales estuvieron muy espesos en los metros finales. El discurrir del reloj y la inspiración de Taranilla, que voló hasta la escuadra para sacar un derechazo de Francis Flores, fueron robando la chispa a un partido que, minuto a minuto, fue cayendo en la lucha física. Al final, el empate hizo justicia a los méritos acumulados en el césped.