El Espanyol venció ayer en el Nuevo Los Cármenes a un Granada que con esta nueva derrota pone un pie y medio en Segunda División, mientras que el triunfo sirve a los catalanes para colocarse a solo dos puntos de la séptima plaza.

Sergio García adelantó a los visitantes en el primer tiempo, Diego Mainz dio esperanzas a los locales con la igualada en la segunda parte, aunque al final, con los andaluces volcados en busca de un triunfo que les podría haber metido de lleno en la pelea por la permanencia, fue Montañés quien marcó el tanto que dio los puntos a los españolistas.

La primera parte, que fue mala de solemnidad, estuvo dominada por un Granada que se mostró casi siempre lento y previsible con el balón ante un Espanyol bien colocado y al contragolpe.

El Espanyol, que fue creciendo en el partido a medida que los rojiblancos se ahogaban en su propia impaciencia e incapacidad, apenas inquietó, pero se fue al descanso con ventaja en el marcador.

La segunda mitad comenzó como la primera, con una clara ocasión para los locales. Con más fe y empuje que fútbol, el Granada llegó a empatar, pero el mazazo definitivo fue el gol de Montañés, que coloca al Granada al borde del precipicio.