El tenista español Rafa Nadal ha encajado una sorprendente derrota en la segunda ronda del Masters 1.000 de Montreal, en una jornada en la que se han despedido Feliciano López y Fernando Verdasco, pero Nicolás Almagro se ha clasificado para tercera ronda.

El número dos del mundo, de regreso a las pistas tras su derrota en la final de Wimbledon, permitió al croata Ivan Dodig remontar el encuentro y se despidió por 1-6, 7-6(5) y 7-6(5) para encajar su peor resultado en un Masters 1.000 desde 2008.

A pesar de que Nadal se apuntó el primer set con autoridad y dominaba el segundo (3-1) cuando permitió la reacción de Dodig, 41 del ránking, a quien no le tembló el pulso en el 'tie-break'. En el tercer set, el manacorí volvió a desperdiciar su ventaja (3-0 y 5-3) y se despidió a las primeras de cambio de la cita canadiense.

Se trata de la primera derrota en la segunda ronda de un Masters desde que Juan Carlos Ferrero le venciera en mayo de 2008 en Roma. Sin embargo, en aquella ocasión, Nadal sufría unas ampollas en los pies que prácticamente no le dejaban andar.

El mallorquín había llegado a la final en los cinco primeros Masters del año, por lo que este resultado es un serio revés en su preparación para el US Open, donde tratará de defender el título conquistado el pasado año.

Tampoco tuvieron fortuna sus compañeros Fernando Verdasco y Feliciano López, que cayeron eliminados al verse obligados a disputar dos encuentros seguidos por la lluvia que alteró el programa de la jornada el martes. El madrileño cedió en tres sets ante Janko Tipsarevic, próximo rival de Dodig, por 6-4, 6-7(5) y 6-3 y el toledano, verdugo de Stepanek en primera, cayó contra Mardy Fish por un contundente 6-2 y 6-3.

En cambio, Nicolás Almagro solventó con brillantez y su habitual combatividad su duelo frente al ucraniano Sergi Stakhovsky, del que se deshizo en dos sets (6-2 y 7-6(5)), en un envite en el que murciano sacó de la pista a su rival en el primer set y supo sufrir en el segundo para llevarse con sangre fría el 'tie-break' que le daba el derecho a seguir adelante en el certamen canadiense.