El Martín Carpena debe acoger una buena muestra de los mejores jugadores del mundo en el mes de noviembre. En función de cómo se resuelvan las eliminatorias del próximo mes de septiembre se tendrá ya un mapa más claro. Obviamente, que se meta España es básico para el éxito del evento. Entre el 14 y el 18 de septiembre se competirá con Canadá, Serbia y Corea del Sur por dos plazas en el torneo. Será un momento delicado, viene justo tras el US Open. La profundidad del tenis español, con cinco jugadores entre los 30 mejores del mundo (Rafa Nadal, el fenómeno Carlos Alcaraz, Roberto Bautista, Pablo Carreño y el malagueño Alejandro Davidovich), debe dar versatilidad para que se componga un equipo de garantías para asegurar el ticket para Málaga.

Igualmente, la final de la Copa Davis llegará justo la semana después de las Nitto ATP Finals, el tradicional Masters con los ocho mejores jugadores del mundo. El hecho de que se excluyera a Rusia por la invasión de Ucrania propicia que el vigente campeón de la competición, con Medvedev y Rublev, no esté presente. Puede estar, no obstante, en Málaga Djokovic si Serbia accede con España en su grupo, en su defecto Canadá con Shapolavov y Aliassime, ambos consolidados en el Top 20. La nueva gran generación de tenistas italianos (Berrettini, Sinner, Musetti...), los siempre competitivos argentinos, estadounidenses, franceses, alemanes, australianos... Mucha variedad posible para confluir en Málaga. Es cierto que a final de temporada escasean las fuerzas y hay lesiones, pero la Davis siempre atrae.